La tecnología digital ha cambiado la existencia cotidiana de los asturianos. Hasta hace muy pocos años llevábamos una dobre vida: la real ("off-line") y la "online", cuando nos conectábamos a la red. Ahora las dos se han fusionado. "Internet no se considera una actividad aparte, se ha interiorizado (...) La tecnología empieza a ser una parte central en la vida de las personas". Son las tesis que están en la base el informe sobre la sociedad de la información en España, uno de los documentos de referencia del sector, que cada año elabora la Fundación Telefónica. Este prolijo documento, frente al tópico, retrata a la sociedad española como altamente tecnológica y donde el móvil acaba de convertirse en el dispositivo hegemónico para acceder a contenidos y relacionarse (siete de cada diez concierta sus citas por aplicaciones como Whatsapp). Dibuja una sociedad en la que las personas maduras ya se han incorporado con extraordinaria fuerza a la era digital y donde, especialmente, empieza a brotar una enorme preocupación sobre la privacidad de todos esos datos personales y comprometedores que están ahí "colgados". La tecnología se ha colado en nuestro ADN. Y, además, es sexy: un 42% de los encuestados para este informe considera que el uso de la tecnología nos hace más atractivos. Eso sí, los hombres son más sensibles que las mujeres a esa erótica digital.
¿Estamos seguros? El 37,9 % de los españoles almacena sus datos personales en "la nube". ¿Están realmente seguros en internet esos recuerdos, documentos tan íntimos o comprometedores? La sensación generalizada parece ser que no pues el 85,2% de los internautas reclama el control de su información personal o la posibilidad de identificarla y borrarla llegado el caso. El recelo a ser espiado existe: el 43% de internautas desconecta la cámara o la tiene tapada, por ejemplo. El estudio indica que las mujeres están mucho más preocupadas que los hombres por la privacidad.
El abuelo digital. Hace cinco años, sólo 1 de cada tres personas entre 55 y 64 años se habían conectado a internet en los últimos tres meses. (Y sólo el 13,8% entre las personas de más de 65). Hoy, el 64,6% de personas maduras (menores de 65) ya acceden a la red con normalidad. Este tipo de internautas creció un 20% mientras que en el acceso medio de la población aumentó en 12,7 puntos porcentuales. Además, los españoles entre los cincuenta y los sesenta años están por encima de la media a la hora de hacer operaciones bancarias por internet o relacionarse digitalmente con la administración. Se cierra la brecha digital en la población entre 55 y 65 años. Es la gran novedad del año, subraya el informe. Durante el pasado ejercicio se incrementó un 48,5% el número de personas de ese rango de edad que compran por internet, creció un 41,83% los usuarios de esa edad que hacen cursos de formación, aumentó un 28,45% los que hacen o peraciones bancarias y creció el 24,87% los que efectúan algún tipo de trámite con la administración.
El año del smartphone. El año 2015 fue, según el estudio, el ejercicio en que los teléfonos inteligentes, los "smartphones", superaron al ordenador como dispositivo hegemónico de conexión a internet, con una ventaja de 5,4 puntos. Y eso en un país que es líder en su entorno en penetración de los nuevos dispositivos tecnológicos. El 82,8% de los españoles tiene smartphone, el 58,9% tablet, el 37,4% tiene un libro electrónico y el 36,3 por ciento smart TV. Y un dato relevante. España es uno de los países con mayor porcentaje de los llamados "early adopters", los usuarios avanzados, los que abren brecha con los nuevos dispositivos y tiran del resto en la implantación de las innovaciones. Esos representan un 15,8 por ciento de los internautas. El triunfo del teléfono móvil como dispositivo rey conlleva un mayor uso de aplicaciones digitales (apps) para acceder más fácilmente a servicios. Cada español tiene una media de 30 apps descargadas en su móvil.
Quedamos. Uno de los ejemplos claros de que la barrera entre el mundo real y el digital empieza a diluirse es el uso de la mensajería instantánea (tipo Whatsapp o Telegram) comunicarse. La utilización de estas aplicaciones para organizar quedadas o eventos creció el año pasado del 34% al 73% de los usuarios. El 91,6% de los internautas utilizan este tipo de chats. De hecho, las llamadas de voz son menos utilizadas en algunas franjas de edad. En el caso de los jóvenes entre 14 y 19 años el cien por ciento se comunica por chat móvil, pero sólo el 82% llama por teléfono y habla con sus amigos. Eso sí, el informe indica que el uso de aplicaciones como el Whatsapp se va atemperando. Un tercio de los encuestados considera que las usa demasiado. Uno de cada cuatro usuarios empieza a mostrar síntomas de agotamiento y hay un 11,2 por ciento que confiesa que está sopesando dejar de utilizarlas. Esta situación se produce especialmente entre los usuarios entre 14 y 19 años.
Todos conectados. En Asturias, el 73,9% de las viviendas tiene ordenador y el 78,7% posee conexión a internet de banca ancha, 24 puntos más que hace cinco años. El uso de internet ha crecido desde 2010 en la región en 16 puntos porcentuales: un 78,3% de asturianos se han conectado en los últimos tres meses a la red, un aumento de 4 puntos con respecto al año pasado. En 2012 el número de asturianos que se conectaba habitualmente a internet era 18 puntos inferior y se situaba en el 60,4%.
Y comprando. El comercio electrónico ha tenido su gran año en 2015 en Asturias. El 30,2 % de los asturianos compró por internet en los últimos tres meses, según recoge el informe sobre la sociedad de la información en España. Es el mayor crecimiento interanual de los últimos diez años. En 2010, las personas que utilizaban el comercio electrónico en la región representaban el 24,2 por ciento.
En la redes sociales, ¿pero menos? El 63,2% de los asturianos se conectan a internet para participar en las redes sociales, refleja este informe. Es una presencia que se ha incrementado en 3 puntos porcentuales con respecto al año pasado. No obstante, parece que los usuarios de la región se están desenganchando ligeramente pues en 2012 esa presencia en redes llegan al 77,8 por ciento. El otro uso principal que los asturianos dan a la red es la descarga de contenidos: un 63,7% confiesa que se conecta para eso.
