Las Jornadas de Agosto en el teatro Palacio Valdés de Avilés serán pura fiesta: una temporada completa sintetizada en cinco semanas. Desde hace décadas en Avilés se prueban los éxitos que vendrán y que se llevarán los aplausos de Madrid o Barcelona durante el siguiente otoño; esta es una de las virtudes de los programadores locales: ser los primeros. Sin embargo, el resultado de 2015 no estuvo a la altura de las expectativas. El ciclo que se presentó ayer en Avilés es de fuegos de artificio: cinco funciones en cinco semanas, tres estrenos nacionales y dos espectáculos en un redoble mortal: un Quijote hecho a la manera kathakali (estilo escénico hindú de gran tradición en el suroeste de la India) y un montaje alternativo procedente del Festival Internacional de Teatro de Almagro. "Nuestro acuerdo con el Festival de Almagro no sustituye al que veníamos desarrollando con el de Mérida. Lo que pretendemos nosotros es sumar", explicó Carlos Cuadros, el director general del Centro Niemeyer, una de las dos instituciones que programan de manera pareja el teatro que se verá en Avilés en un par de meses (la otra institución es la Fundación de Cultura del Ayuntamiento de Avilés).
La primera función de la temporada está prevista para el 29 de julio. Será una versión particular de las aventuras del ingenioso hidalgo Don Quijote de La Mancha: un espectáculo que está a mitad de camino entre la ópera, la danza y el propio teatro, una producción de la compañía "Margi Kathakali", de Trivandrum, en el suroeste de la India. Dirige Ignacio García, especialista en óperas. "Este espectáculo es histórico, no me consta que se haya realizado un montaje como este nunca en España", señaló Carlos Cuadros entusiasmado. Recordó, eso sí, un montaje que hace treinta años presentó en España el legendario director de esecena londinense Peter Brook a la manera del kathakali. "Lo que traemos este verano es puramente una producción kathakali", apostilló Cuadros.
El modo katakhali de hacer teatro se practica desde el siglo XVII en el pradesh de Kerala, que está en la costa sur de la India; se baña en el mar Arábigo. Los actores representan en lengua malayalam (con sobretítulos), con maquillajes espectaculares y formas expresivas a pleno rendimiento. "El repertorio de esta forma de hacer teatro es corto", señaló Cuadros. Y citó el "Ramayana" o el "Mahabharata". "Últimamente incorporaron un 'Rey Lear' y ahora, de la mano de la Fundación Casa de la India, han montado este Quijote", añadió el director del Niemeyer. "Esta es una oportunidad única... a no ser que viajemos a Kerala. Esta forma de entender el teatro es equiparable a 'Las Meninas'", destacó el responsable de la fundación avilesina.
El Centro Niemeyer también está reservado el 19 de agosto. Entonces acogerá una de las diez funciones finalistas del premio off del Festival de Almagro. "No sabemos cuál será. Hay un jurado en el que estará nuestro programador de teatro: Antonio Ripoll", dijo Cuadros.
A la concejala de Cultura de Yolanda Alonso, le tocó el turno de anunciar los tres estrenos nacionales del Palacio Valdés: "La velocidad del otoño", de Magüi Mira (5 de agosto), "Héroes", de Tanzim Townsend (12 de agosto) y "Cartas de amor", de David Serrano (26 de agosto). "Tres funciones sobre personajes en sus últimos días, con tres directores de primer", destacó la edil. Townsend hace tiempo que no venía por Asturias. La frecuentó hace una década, cuando "El método Grönholm". Mira, sin embargo, es fija últimamente. David Serrano, por su parte, estrenó en Avilés "La venus de las pieles", "Lluvia constante" o "Buena gente" y Ahora anda con "Billy Elliott".
