La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Un gaitero "made in Cuba"

Yunier Guerra siguió las clases de Flavio Benito en el Centro Asturiano de la isla

Yunier Guerra con su gaita, en La Habana, donde ofrece recitales al aire libre. L. M.

De paseo por el malecón de La Habana se escucha de fondo el "Asturias, Patria Querida". Es la gaita de Yunier Guerra, un cubano que descubrió este instrumento hace aproximadamente tres años y retomó su estudio a través del gaitero asturiano Flavio Benito, que fue por aquel entonces a dar unas clases en el Centro Asturiano de la ciudad. Yunier se quedó entusiasmado, aprendió los pasos básicos muy rápido y decidió seguir por su cuenta. En la actualidad da clases en un parque al aire libre a unos niños que apuntan maneras, Daniel David, de 13 años, y Diago, de 11. También son cubanos, descendientes de asturianos de cuarta generación.

Su madre, orgullosa, explicaba que comienzan a tocar con la flauta y ensayan ahí las melodías, después se pasan a la gaita. El mayor tiene una gaita de la fábrica del villaviciosino José Ángel Hevia, un ídolo para ellos. Muchos de los instrumentos son cedidos por el Principado y bien aprovechados por los jóvenes cubanos, que muestran mucho interés en la música asturiana.

Yunier, de 34 años, que se declara seguidor precisamente del músico José Ángel Hevia, disfrutó de su presencia en La Habana hace escasas fechas, cuando el autor de "Busindre Reel" se pasó por la isla de vacaciones. "Fue un momento muy especial, tocó mi gaita y estuvimos hablando; para ser alguien tan grande en la música es muy cercano en el trato", reconoció el gaitero cubano.

El artista asturiano aprovechó para intercambiar impresiones con la gente en la calle y entremezclar su música con algunas locales, como el son o la salsa, tocando ritmos como la popular "Guantanamera". Yunier tiene partituras de canciones tan populares como "En Oviedo no me caso", "Muñeira de Boal" o el "Pericote" de Llanes. De esta forma se acerca no sólo la música asturiana, sino también la lengua y la cultura a los cubanos. "Es bonito sentir estas canciones tan lejos de la tierrina", apuntaba una pareja de gijoneses de turismo en La Habana.

El joven cubano también se las ingenia para reparar él mismo su gaita o hacer pequeños arreglos: "A veces tengo que encontrar alternativas ante posibles roturas, ya que aquí no existe modo de arreglo. Tengo una sola payuela que me ha durado todos estos años". Por eso, continúa diciendo, "en aspectos como éste sí se demanda más ayuda y facilidades por parte del Principado, para seguir avanzando y permitir que siga creciendo esta música en este territorio tan querido por los asturianos".

En Cuba existen varios festivales cada año que presentan a los grupos de música asturiana formados en el país. Uno de ellos es La Huella de España, que aglutina formaciones de todas las sociedades españolas presentes en La Habana, especialmente la gallega, la canaria y la andaluza.

"La Banda de Gaitas de La Habana tiene mucho éxito normalmente y también grupos de baile tradicionales", declaró Ana Karelia, madre de los pequeños gaiteros. Todavía se respira asturianía en la isla caribeña.

Compartir el artículo

stats