La película "Migas de pan", una producción hispano-uruguaya dirigida por Manane Rodríguez que es candidata por Uruguay a los "Oscar", es uno de los muchos dramas que este año compiten en la sección oficial del Festival Internacional de Cine de Gijón (FICX). Su directora, Manane Rodríguez, uruguaya afincada en España, se ha convertido en la primera cineasta de su país en poner el foco sobre una tragedia silenciada hasta ahora: los abusos, torturas y prisiones que sufrieron numerosas mujeres entre 1973, tras el autogolpe de Juan María Bordaberry, y 1985. En 2011, veintiocho expresas políticas presentaron una denuncia penal por violación y tortura.

Uruguay, considerada durante años como la "Suiza de América", no fue ajena a la violencia y el terror que las dictaduras militares ejercieron en varios países latinoamericanos en aquellos años. Para Manane Rodríguez hay, sin embargo, diferencias con otros en los que hubo "comisiones de la verdad" que trataron de esclarecer lo sucedido y poner nombre y rostro a los responsables de aquellos crímenes.

"La diferencia con Argentina, por ejemplo, es que allí se sabe quiénes fueron los responsables, mientras que en Uruguay no", dijo ayer la cineasta en una comparecencia junto a Justina Bustos. La joven actriz argentina, que en esta cinta comparte protagonismo con Cecilia Roth (encarnan el mismo personaje, Liliana, en diferentes etapas de su vida), es una de las revelaciones del cine latinoamericano. Dicen que va para estrella, que así lo indica su interpretación e "Migas de pan".

"Es una película que llega tarde, pero también la justicia ha llegado tarde", subrayó Manane Rodríguez. La realizadora contrapuso el caso de estas mujeres uruguayas al de otras luchadoras por la democracia y la libertad cuya lucha y sufrimientos sí fueron reconocidos: "Una impunidad que sufre la sociedad". La película, con guión de la propia directora y de Xavier Bermúdez, está inspirada en hechos reales.

Bebe también del libro "La tienta". Su autora es una montevideana, Ivonne Trías, que sufrió cárcel durante la dictadura. "Migas de pan" (el título es una referencia a las de los cuentos infantiles y al material al que recurrían las presas para hacer manualidades y darse ánimo) cuenta el secuestro, violación, tortura y encarcelamiento de Liliana Pereira, a quien la dictadura uruguaya arrebató también la patria potestad de su hijo. Se filmó en La Coruña y Uruguay.

Manane Rodríguez recordó ayer que estas mujeres ni siquiera han sido reconocidas, en muchos casos, por los hombres que compartieron infortunio. También han sido ignoradas por los medios de comunicación. "Los hombres tomaron los micrófonos en esos momentos y no han vuelto a soltarlos", dijo.

Fue Cecilia Roth quien pensó en Justina Bustos para compartir el papel de Liliana en una historia cuajada de escenas "difíciles y duras", según explicó la joven actriz. "La verdad es que ha sido un regalo muy lindo; tuve el guión pronto y puede investigar, aunque lo que más me ayudó fue una charla con Ivonne (Trías), sentir su fuerza y su dolor", relató.

"Parece que Cecilia (Roth) vio el parecido entre ambas; lo que me ayudó a conocer a fondo el personajes es que hice todas las escenas", explicó Justina Bustos. Para Manane Rodríguez, el éxito de la dirección de actores en una película depende en un ochenta por ciento de la "elección" del elenco, y otro diecinueve por ciento de las bondades del guión.

¿Cómo han recibido el filme las protagonistas de aquellos trágicos sucesos de la dictadura uruguaya? "Alguna de las presas me dicho que le hacía bien ver la película", señaló Justina Bustos. "La sociedad ni siquiera les ha preguntado", indicó la directora.