Hugo Carrio (Gijón, 1978) siempre tiene presentes los valores que le inculcaron sus padres, el añorado Celestino Carrio y María Rita Avello. "Este premio es de ellos, porque siempre me apoyaron", afirmó ayer el director de orquesta al recoger los atributos de la distinción "Asturiano del mes" que, correspondiente a noviembre de 2016, le concedió LA NUEVA ESPAÑA. Un galardón que Hugo Carrio recibió acompañado de su madre, y que reconoce su trabajo en favor de miles de niños de América Latina -primero en el Sistema Nacional de Orquestas de Venezuela y actualmente como director de la Orquesta Sinfónica Prejuvenil "Sinfonía por el Perú"- a los que a través de la música está dando una oportunidad de tener un futuro.

"Es genial que desde Asturias se reconozca lo que estamos haciendo en Perú", afirmó Carrio cuando la directora de LA NUEVA ESPAÑA, Ángeles Rivero, y el gerente del periódico, Eduardo Suárez, le hicieron entrega de los atributos de la distinción: la estela diseñada por el artista José Manuel Legazpi, la portada personalizada del diario y la caricatura de Pablo García. "Has logrado una cosa maravillosa: has hecho de la música un instrumento revolucionario para cambiar tu entorno y dar esperanza, un futuro, a 7.000 niños sin recursos. Nos resulta conmovedor", señaló Ángeles Rivero.

Esos 7.000 niños son los que, en la actualidad, se están formando en los quince centros que "Sinfonía por el Perú", fundada por el tenor Juan Diego Flórez, tiene repartidos por todo el país. Una cifra que ha crecido exponencialmente desde la llegada de Carrio a la formación, en enero de 2016, y que el director asturiano aspira a multiplicar en los próximos años, con el objetivo de llegar a los 30.000 niños en 2021.

Entre todos los menores, a partir de 5 años, que se forman en los centros de "Sinfonía por el Perú", doscientos treinta integran la Orquesta Sinfónica Prejuvenil. Una formación que bajo la dirección de Hugo Carrio está alcanzando un nivel extraordinario. En noviembre de 2016 la joven orquesta dio un concierto para el presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski. El próximo mes de enero actuarán ante el Papa en Lima. Y para el año 2019 la formación ha sido invitada a participar en el Festival de Salzburgo.

Pero Carrio valora, aún más que esos triunfos artísticos, el impacto que tiene en la vida de los niños aprender a tocar un instrumento y formar parte de la orquesta. Al gijonés se le iluminan los ojos cuando relata el cambio que experimentan los pequeños desde que llegan encogidos, "vencidos", hasta que estrechan lazos con los otros miembros de la formación y, ya liberados, se yerguen orgullosos de formar parte de ese colectivo. "Lo que hace uno revierte en toda la orquesta, saben que tienen una responsabilidad con los otros", reflexiona el músico, que considera que "en Asturias falta una orquesta infantil y juvenil como la de 'Sinfonía por el Perú'".

El "Asturiano del mes" le llega a Carrio en un buen momento en lo profesional, puesto que su proyecto en Perú ya está dando vigorosos frutos, y también en lo personal: en septiembre se casa con la peruana Martha Ramírez.