Las obras más destacadas del fotógrafo húngaro Nicolás Muller, que pasó los últimos años de su vida en Andrín (Llanes), se pueden visitar desde ayer y hasta principios de agosto en Madrid (en la sala Tiempos Modernos) dentro de la programación del festival internacional "PhotoEspaña". La exposición recorre la obra de Muller de los años 30, 40 y 50 y muestra sus instantáneas de calle, en las que era un auténtico pionero, y algunos de sus trabajos de estudio. La muestra ha sido comisariada por su hija, Ana Muller.