El nuevo Sporting se vertebra a partir de los catorce futbolistas con contrato en vigor que están llamados a mantener las bases de los éxitos conseguidos durante las últimas dos campañas. El conocido popularmente como Sporting de los guajes busca heredero para continuar con el crecimiento del club en Primera División. Puede que, finalmente, no sean todos los que están, ya que el conjunto gijonés está pendiente de poder añadir a la lista a Bernardo, que se pronunciará en breve sobre su posible renovación, y también tiene la intención de abrir la puerta a los dos únicos futbolistas con sólo un año más de contrato, Vranjes y Alberto. Mientras la dirección deportiva trabaja en la atar alguna de las diez incorporaciones que se buscan, otro guaje, Miguel Ángel Guerrero, confirmó ayer que no seguirá en Gijón.
No habrá línea en el esquema rojiblanco que se quede sin sufrir variaciones. Las nueve bajas que se han registrado, hasta el momento, y el hecho de haber estado dos campañas consecutivas sin la oportunidad de reforzarse, sin restricciones, lleva a que el Sporting afronte una profunda remodelación de su plantilla. Ni siquiera la portería, un puesto que, a priori, parecía cubierto, se salva. La dirección deportiva está abierta a renovar la competencia bajo palos y a escuchar la posibilidad de que Alberto pueda buscar minutos en otro equipo. El barcelonés ya contó con ofrecimientos interesantes durante las últimas dos campañas, pero dio prioridad a continuar en Gijón. Además, es una de las figuras más queridas en el vestuario por su capacidad de liderazgo y compromiso.
En la defensa, el club intenta tocar todas las teclas posibles para seducir a Bernardo, el señalado por Abelardo como el mejor líder para mantener el espíritu del equipo y mirar hacia el futuro con ambición. La renovación del colombiano se convertiría en la primera gran victoria en una planificación que se inicia marcada por los errores para no poder atar a los otros dos jugadores que deseaba Abelardo, Jony y Luis Hernández. El que tiene contrato, pero parece más fuera que dentro, es Vranjes, que no es un perfil del gusto del cuerpo técnico.
Los cimientos con los que parte el Sporting dejan al descubierto la necesidad urgente de lograr recambios en varios puestos y un plan de futuro marcado hasta 2019. Es la fecha límite fijada en materia de contratos, a la que se acogen siete futbolistas: Isma López, Canella, Meré, Sergio, Rachid, Pablo Pérez y Carmona. Finalizan, en 2018, Cuéllar, Lora, Nacho Cases, Ndi y Castro, y el año que viene, los citados Vranjes y Alberto. La previsión es que Nico Rodríguez, director deportivo, explique el lunes, públicamente, los planes sobre los que gira el nuevo Sporting que se está construyendo.
