No fue el de ayer el mayor desembarco realizado por la Mareona en el Bernabeu, pero el campo del Real Madrid se convirtió en el mejor escenario para recuperar la confianza de un sector del sportinguismo defraudado tras la imagen ofrecida por el equipo ante la Real Sociedad. En un ambiente cargado de dudas, hubo unos 700 aficionados rojiblancos que quisieron estar en las gradas del coliseo blanco para compartir tardes como la ofrecida por el conjunto de Abelardo, que acarició el empate ante el líder y dio razones para creer en un Sporting que, como aseguró el Pitu, "va a ir para arriba".

No faltó una bandera o una bufanda rojiblanca en cada rincón por el que pasaba el Sporting en su viaje a la capital de España. El conjunto gijonés fue recibido por seguidores del equipo a su llegada al hotel Miguel Ángel y también nada más que el autocar se dejó ver en el Bernabeu, en las horas previas al encuentro ante el líder. La intensa lluvia caída en la capital de España fue un guiño añadido a esa pequeña invasión asturiana y rojiblanca que dejaba su estela en la visita al Madrid.

La Mareona se hizo sentir a pesar de que el Sporting devolvió al mitad de las 1.200 localidades que el club blanco había enviado a Gijón en un primer momento. Al medio millar desplazado desde Asturias se unió después la colonia de sportinguistas que residen en la capital de España y sus alrededores, habituales en estas citas. Varias peñas se dejaron ver en el campo. Fueron los casos de la peña Alejo Caso, Ébano, de Versalles, Sentimiento Rojiblanco o Federación de Peñas Sportinguistas fueron algunas de las que contaron con representación en el Santiago Bernabeu y estuvieron cerca de traerse un punto.

El Sporting abre ahora un ciclo en el que disputará dos partidos en casa en una semana. El primero este martes, en el que recibirá al Éibar en un encuentro correspondiente a la ida de los dieciseisavos de final de la Copa del Rey. El duelo ante los vascos se iniciará a las 21.00 horas. El siguiente también tendrá al municipal gijonés como escenario y cuenta con un valor añadido. El Sporting recibe a Osasuna, rival directo por la permanencia en Primera. Un duelo que se iniciará el domingo, a las 18.30 horas.