"Las cuentas no son las que nos habían prometido porque los gastos se han disparado y hay unas desviaciones inaceptables". La primera intervención de la tarde, en la que Diego del Valle manifestó el rechazo de "Tu fe nunca decaiga" a las cuentas presentadas por el consejo de administración marcó el tono de la junta. Del Valle fue quien más apretó al mesa directiva, por ejemplo, considera "una vergüenza como sportinguista haber tenido que vender nuestra sociedad a Doyen Group", y pidió al consejo que exija responsabilidad a quien estableció esa relación. El ataque hizo mella y Javier Fernández se revolvió pidiendo rigor y rechazando lo que consideró mala fe al presentar Del Valle algún dato equivocado. Este no se quedó atrás y advirtió al directivo de que no le consentía esta censura. Lo hizo con tanta virulencia que Fernández se disculpó.

Como ya había hecho, el presidente rojiblanco justificó la disminución del déficit con gastos no previstos, como el acuerdo con Doyen, la indemnización de García Amado (600.000 euros) que reconoció que ya debía estar contemplada en el presupuesto o la actualización salarial pendiente del personal. También Unipes votó en contra de las cuentas y su presidente, Víctor Sánchez, pidió al consejo que "saque a la luz toda la deuda por fin". A cambió celebró la gestión social.

La Federación de Peñas sportinguistas evitó valorar las cuentas y se abstuvo en esta votación. Su presidente Jorge Guerrero sí que tomó la palabra en el tema de los salarios y lo hizo para atacar con virulencia a Javier Fernández, quien se mostró sorprendido y decepcionado por un ataque tan directo. Guerrero pidió que los directivos cobren por objetivos y que asuman responsabilidad con penalizaciones, le reprochó la falta de detalles con la afición, reclamó poder elegir el presidente del Sporting y le acusó de ser un dirigente "poco querido y sin credibilidad entre la afición". La sorpresa fue mayúscula cuando en la votación apoyó el sueldo de los directivos.

Un momento de máxima tensión se produjo en ruegos y preguntas, cuando Javier Santos felicitó al consejo porque la dimisión de Abelardo eclipsó el interés por la junta. Javier Fernández respondió con durante al valorar que está acusación resultaba "bastante rastrero".

Otro momento de tensión elevada fue cuando Edgar Fernández presentó un ruego: "Que se vayan"; y una pregunta: "¿Cuándo se van?".

También hubo alguna novedad interesante en la junta. Por ejemplo cuando Javier Fernández anticipó que el Tribunal Económico Administrativo Central (TEAC) ha estimado algunos de los recursos presentados por el club en los que señalaban que la Agencia Tributaria no había desarrollado correctamente el proceso por el que se negó a aceptar el pago en especias de la deuda rojiblanca. A la espera de que Hacienda recurra, Ramón de Santiago explicó que el club puede reclamar los intereses y recargos pagados que podrían ascender a 2,2 millones. Esto hay que interpretarlo en el contexto de una sentencia similar fallada a favor del Getafe en este mismo proceso.