De las buenas señales que emite el proyecto del Sporting, quizá la mejor sea la estabilidad. La gráfica de resultados de los rojiblancos se mantiene prácticamente horizontal y sin apenas alteraciones a pesar de la enorme igualdad que existe en la categoría. El Sporting se ha mantenido en puestos de fase de ascenso en diez de las doce jornadas disputadas y en cinco de ellas ha ocupado una de las dos plazas de ascenso directo. Los rojiblancos acabaron la jornada inaugural en la décimo quinta posición tras su empate en Alcorcón. Después de eso, tan sólo en una ocasión cayeron fuera de las seis primeras posiciones. Fue en la quinta jornada, tras la dolorosa goleada recibida en Soria, cuando los de Herrera retrocedieron hasta la octava posición en la tabla clasificatoria. La puntuación estaba tan apretada que al Sporting le bastó con ganar al Lorca en El Molinón una semana después para situarse líder. Los rojiblancos ya habían encabezado la clasificación en la tercera jornada, tras encadenar las victorias ante Lugo y Nàstic en Tarragona.
En la comparativa con las temporadas que desembocaron en los ascensos de Abelardo y Preciado, el Sporting de Herrera es el que menos goles recibe (8), por 9 de los dos anteriores. En el ascenso de los guajes, Cuéllar terminaría ganando el trofeo Zamora, clasificación que ahora lidera Mariño. Por contra, el equipo más realizador de los tres era el de Abelardo (18), seguido del actual (17) y del de Preciado (16). Son, por tanto, números de ascenso.
