Vídeo, pizarra y práctica. El Sporting inició la semana analizando en imágenes las razones por las que no fue capaz de pasar del empate en Lorca ante el colista. Baraja reunió a sus futbolistas durante casi media hora para aclarar, apoyado en un resumen del encuentro, algunos de los aspectos tácticos que provocaron el atasco futbolístico del equipo. Tras corregir movimientos, los citó en el césped. Allí continuó limando detalles con el balón de por medio, e iniciando así la preparación para el duelo del viernes. Osasuna, el mejor visitante de la categoría junto al Nàstic de Tarragona, llegará a El Molinón para poner a prueba el pleno de triunfos del Pipo en casa.
El empate ante el Lorca devolvió al Sporting a la realidad que se vio en el Tartiere. Los rojiblancos dieron de nuevo la sensación de ser un conjunto sin soluciones o alternativas cuando las cosas se le ponen cuesta arriba lejos de El Molinón. Incapaz de encontrar la fórmula para sobreponerse a partidos trabados, todo empeoró después de un golpe psicológico como el de fallar un penalti. La particular "Barajina" en la vuelta a Mareo, tras disfrutar de una jornada de descanso, también pulsó el ambiente para sacar sobre el césped algo más que fútbol. El Pipo quiere trasladar la intensidad que se ve en El Molinón a los partidos a domicilio. Lo dijo dentro del vestuario, y también fuera.
A cuatro puntos de la promoción, cinco si se tiene en cuenta que los gijoneses tienen perdido el goal-average con el sexto clasificado, el Numancia, la llegada de Osasuna eleva el riesgo de un nuevo tropiezo. Si el Sporting gana, empataría a puntos con los navarros, uno de los rivales directos en la pelea por la promoción. Si pierde, doblaría la distancia con los navarros, séptimos en la tabla. Una distancia importante a estas alturas del campeonato.
Osauna no viene en su mejor momento, por mucho que sólo el Nàstic iguale sus 21 puntos a domicilio. Sólo ha ganado uno de sus últimos cuatro partidos, ante el Almería, y la pasada jornada empató sin goles en El Sadar ante el Reus.
