Oviedo, Eloy MÉNDEZ

Los usuarios del autocar que comunica Oviedo con Posada de Llanera durante las noches de los fines de semana ya no viajan seguros por culpa de un grupo de jóvenes que organiza constantes sabotajes contra la línea. Según denunciaron ayer los responsables de la compañía Hortal en la Comandancia de la Guardia Civil de la capital asturiana, los actos están perfectamente organizados y tratan de obstaculizar al vehículo con técnicas temerarias, como deslumbrar al conductor con un láser de discoteca, descargar extintores a su paso por un túnel o intentar desviarlo de la carretera realizando maniobras peligrosas con su coche particular. «Creemos que se trata de clientes habituales que la han tomado con nosotros», señalan los afectados.

El primer ataque al «búho» se produjo hace tres semanas, cuando varios jóvenes encapuchados intentaron sacarlo de la vía dando volantazos con su vehículo. «Estamos muy preocupados porque desde entonces no han parado de boicotearnos, y estamos realmente preocupados por lo que les pueda pasar a nuestros clientes», subraya Dionisio Acebal, uno de los responsables de la compañía y que ayer presentó la demanda. Días después se produjo un intento de apedreamiento del autocar y el sabotaje que sufrió en uno de los túneles que dan acceso a Llanera, donde se produjo el vaciado de los extintores, que cegaron completamente al chófer, lo que le obligó a frenar en seco.

«El último suceso ocurrió este viernes, cuando dificultaron la visión de nuestro trabajador en Lugo de Llanera con un potente láser, como los que se utilizan en las discotecas. Tuvo que dar un giro brusco, aunque, por fortuna, no pasó nada», explica Acebal. «Son capaces de cualquier cosa y por eso hemos pedido la ayuda de la Guardia Civil, que nos ha prometido vigilar de cerca todo el recorrido», añade. Además, en un reciente viaje se causaron desperfectos en el interior del autocar por valor de más de 300 euros. «Creemos que fueron los mismos», sostienen los directivos de Hortal.

La compañía, que tiene la concesión de la línea entre Oviedo y Posada de Llanera durante las madrugadas de los sábados y de los domingos, cuenta con un único autocar para realiza el trayecto, que se inicia a las horas en punto alternando la localidad de origen, y hace paradas en Lugo de Llanera, Soto de Llanera, La Fresneda urbanización y Lugones. El servicio comienza a las 23.00 y finaliza a las 06.00 horas. Casi todos los viajeros son jóvenes que se desplazan desde los concejos de Siero y Llanera a Oviedo para disfrutar de unas horas de ocio nocturno.

«Estamos casi convencidos de que son un grupo de chavales a los que nuestro conductor les llamó la atención hace un tiempo porque intentaron entrar completamente bebidos», señala Acebal, que calcula que el grupo está formado por «unos quince» jóvenes. «Seguro que los conocemos porque se tapan la cara para que no les podamos identificar», sostiene.

«Estamos hablando de un tema realmente grave porque el autocar viaja casi siempre lleno, es decir, con unos cincuenta pasajeros», explican en Hortal, que temen que la actitud de estos jóvenes afecte incluso a la viabilidad de la línea, ante el riesgo de que muchos habituales decidan optar por otro medio de transporte. «Es urgente que se tomen medidas», concluyen.