La entrada a Oviedo desde la "Y" y la ronda que bordea la capital del Principado quedaron ayer atascadas de nuevo a consecuencia de las obras de mejora del firme de la autopista A-66 a la altura del viaducto del Espíritu Santo, que en estos días se complican además con la lluvia, que contribuye a que haya tráfico más intenso.

La duración prevista de los trabajos es de un mes, según el Ministerio de Fomento, que ya los inició el pasado octubre. También se había anunciado que se intentaría interferir lo menos posible en la circulación, lo que de momento se está logrando a duras penas durante el día y casi nunca a primera hora de la mañana, cuando se suelen registrar los mayores atascos, que superan en ocasiones hasta los tres kilómetros.

Los problemas se centran en dirección a León, entre los puntos kilométricos 23 y 26. Los trabajos que se realizan en el viaducto del Espíritu Santo obligan a cortar al tráfico el carril izquierdo de ambas calzadas desde primera hora de la mañana.

Además de dificultar los accesos a Oviedo, se da la circunstancia de que antes de llegar al puente que supera el polígono industrial del Espíritu Santo está el enlace que permite la incorporación de los vehículos que proceden de la autovía A-64, de Oviedo a Villaviciosa, lo que contribuye a complicar todavía más la circulación en ese tramo.