El tribunal que juzga al doctor Carlos Morín y a otros 10 acusados de un centenar de abortos supuestamente ilegales ha autorizado al médico y propietario de las clínicas a no estar presente en el juicio por sus problemas de salud, aunque sí deberá acudir el día que le corresponda declarar, en la última sesión de la vista, el 10 de marzo.

El tribunal ha rechazado, no obstante, la petición de casi todas las defensas de que las mujeres que abortaron de forma supuestamente irregular no debieran acudir a declarar presencialmente y en su lugar se reprodujera en la sala el DVD de sus primeras comparecencias con el fin de no hacerles volver a pasar por este trance. El juicio ya se había celebrado en 2012 y acabó con la absolución de los 11 acusados pero, tras un recurso de la Fiscalía, la Audiencia tuvo que repetirlo porque no se había tenido en cuenta el testimonio de unos periodistas daneses que hicieron un reportaje en las clínicas de Morín.