La Guardia Civil del puesto de Utrera (Sevilla) detuvo ayer a una norteamericana de 35 años tras apuñalar a su hija de diez meses. Varios vecinos alertaron de que una mujer desnuda iba andando por la calle golpeando los coches y agrediendo e insultando a las personas con las que se cruzaba. La mujer gritaba palabras como "kill" (matar, en inglés) o "Jesús", en estado de "extrema" agresividad. Cuando la acompañaron a casa para que se vistiera, los guardias escucharon los lloros de un bebé. Allí encontraron a la niña, junto al cuchillo utilizado en la agresión. Mientras le taponaban la herida, la mujer confesó la autoría. El marido de la detenida estaba en ese momento en la base aérea de Morón de la Frontera, donde trabaja como militar.