No le bastaba con grabar vídeos mientras conducía duplicando los límites de velocidad y realizando maniobras temerarias. Además tenía que colgarlas en la red, incluso consumiendo sustancias estupefacientes. La Policía detuvo en Madrid a un joven de 23 años que grababa vídeos mientras conducía de forma temeraria y los retransmitía en directo a través de la red social Periscope. Se trata de la primera operación realizada por delitos cometidos con esta aplicación y para la que han sido claves las denuncias de ciudadanos.

Según explicó la Policía en un comunicado, mientras se grababa y retransmitía por Periscope, el joven duplicaba los límites de velocidad y realizaba maniobras temerarias, provocando que los otros conductores tuviesen que apartarse de su carril para evitar un choque. Además, colgó en la red otras imágenes en las que se grababa a sí mismo consumiendo drogas.

En uno de los vídeos se aprecia cómo el joven alardea de que a él nunca le paran y, enfocando con su móvil el cuentakilómetros, demuestra que conduce de noche por las autovías de circunvalación de Madrid a casi 200 kilómetros por hora, en una zona en la que el límite es de 100. Se trata de la primera operación realizada en España por delitos cometidos al usar la aplicación Periscope -una herramienta que permite retransmitir vídeos en directo a través de las redes sociales-, y que se inició gracias a que ciudadanos avisaron de que un usuario de internet compartía desde su cuenta de Periscope esas imágenes.

Por un lado, la Sección de Redes de la Unidad de Investigación Tecnológica identificó el perfil de este joven a través de un rastreo y análisis preventivo que los agentes hacen para detectar comportamientos que supongan una infracción penal. Además, varios ciudadanos denunciaron a través de las cuentas que la Policía Nacional tiene en las redes sociales.

La Policía subrayó que el detenido realizaba maniobras a gran velocidad que provocaron situaciones en las que los otros conductores tuvieron que apartarse para evitar la colisión.