El avilesino David Oubel Renedo, de 41 años, que degolló a sus hijas de 4 y 9 en la localidad pontevedresa de Moraña el pasado 29 de julio, ha sido sometido a un examen psiquiátrico por parte de los forenses judiciales de León, en cuya prisión de Mansilla de las Mulas se encuentra ingresado desde el pasado mes de agosto, tras ser amenazado de muerte por los presos de la prisión de A Lama, donde inicialmente fue recluido. El objeto de este examen es determinar si el parricida tenía las facultades mentales perturbadas cuando cortó el cuello a sus hijas con una rotaflex, tal como sostiene su abogado defensor.

El examen psiquiátrico se practicó anteayer lunes en las dependencias del Instituto de Medicina Legal leonés. El doble crimen podría ser juzgado pronto por el procedimiento de jurado popular. El ministerio público podría solicitar la prisión permanente revisable para este avilesino, cuyas motivaciones para cometer tan horrible crimen no están nada claras. Antes de matar a sus hijas, el hombre escribió una carta a su mujer en el que anunciaba sus intenciones y su deseo de suicidarse. Cuando las fuerzas de seguridad entraron en su casa lo encontraron encerrado en el baño, tras haberse autolesionado. Sin embargo, fuentes de la investigación negaron que el intento de suicidio hubiese sido serio. Unos días antes del crimen, había puesto su chalé en venta.

El hombre se había separado de su mujer para iniciar una relación con un hombre. El haber hecho pública su homosexualidad le valió el desprecio en Moraña, en alguno de cuyos locales tenía prohibida la entrada.