El Juzgado Central número 3 de la Audiencia Nacional continúa la instrucción del caso de los "unetes", la moneda virtual inventada por el valenciano José Manuel Ramírez Marco, una investigación en la que está implicado un langreano, P. S. R., que era el número 3 de la organización Unetenet. Un informe de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) cifra en 48 millones de euros la cantidad que llegó a ingresar este sistema, que para los investigadores no dejar de ser un clásico esquema Ponzi o estafa piramidal, con damnificados en 78 países, desde Burkina Faso a Japón, pasado por Estados Unidos, España o Italia. En este último país estaría el mayor número de afectados, que llegaron a ingresar en la red 20,7 millones de euros. Le sigue España, con 12 millones, luego Estados Unidos, con 3, y Perú, con 2.

El rastro del dinero se sigue por medio mundo. Hay dos cuentas bloqueadas: una en Letonia, con 28 millones, y otra en Liechtenstein, con otros nueve. Pero en Eslovenia se han abierto diligencias por un ingreso de un millón, luego transferido a los Emiratos Árabes. Las pesquisas se siguen en Francia, Panamá, Malta (Unetet había iniciado su expansión por esta isla cuando estalló el escándalo) o Croacia.

Por su parte, la defensa de la cúpula de Unetenet, que corre a cargo del despacho Vox Legis de Oviedo, ha solicitado llamar a declarar a los 180 denunciantes españoles, en la convicción que la mayor parte de esas denuncias (el 98 por ciento, asegura el letrado de Vox Legis Francisco Miranda) son falsas. Los letrados de la cúpula de Unetenet estiman que todo este asunto se debió a la venganza y actividades fraudulentas del creador del software de la compañía, el boliviano Adrián T. R., de quien partió la primera denuncia de este escándalo, que a su vez fue detenido en su país natal por fraude y que según los defensores, bloqueó el acceso al sistema informático de la empresa, cercenando el esquema de negocio y forzando la inmovilización de las cuentas, lo que hace imposible resarcir a los franquiciados, que pusieron en la red una media de 6.000 euros por cabeza.

Según los letrados, el objeto social de Unetenet (nombre comercial de la sociedad Union Business Online, creada por Ramírez Marco en San Vicente de Granadinas en 2009) "consiste en el desarrollo de software, sistemas de marketing on-line, formación, publicidad y herramientas de marketing on-line". Añaden que "ofrece un modelo de negocio de los llamados de venta multinivel, venta directa o marketing en red, en el que una persona se asocia como afiliado franquiciado y recibe una compensación basada en la venta de sus productos o los servicios que presta, generando comisiones por cada miembro que se asocia al sistema de marketing en red", un sistema "perfectamente legal". Los investigadores sostienen que, en realidad, la actividad de los franquiciados consistía en captar nuevas víctimas y que el único "trabajo" que realizaban era insertar anuncios en internet con un "corta y pega".

En abril de 2014, al bloquear Adrián T. R. el sistema informático, lo que impedía los pagos, obligó a la empresa a poner en marcha un sistema de remuneración en base a una moneda virtual, el "unete", "aceptado en múltiples países y establecimientos". Pero en 2015 llovieron las denuncias contra los "unetes" y José Manuel Ramírez, su mujer y P. S. R. fueron detenidos.