Un empresario del carbón afronta cinco años de cárcel acusado de causar un perjuicio económico de dos millones a su propia compañía, que recibía el mineral por el puerto de Avilés. La Fiscalía le atribuye un delito de administración desleal y solicita para el imputado, además, el pago de una multa de 6.000 euros y de una indemnización por los daños económicos causados, más los correspondientes intereses. El juicio se celebra esta mañana en la Audiencia Provincial, en Oviedo.

El ministerio público sostiene que el acusado, que tenía varios socios, cometió numerosas irregularidades en la gestión de la compañía entre su nombramiento y su dimisión. Durante este periodo, y sin el consentimiento del otro administrador (éste se encontraba en Italia), procedió a realizar numerosas transferencias de dinero de la cuenta de la entidad a sus cuentas personales, así como retiradas de dinero sin causa justificada, según la versión de la Fiscalía. La acusación pública concluye que llegó a pagar a través de la cuenta de la sociedad gastos personales como el abono de una cuota a un partido político, recibos de la televisión de pago y facturas de teléfono e internet.