Los dos ganaderos acusados de causar un incendio para regenerar pastos para sus ovejas en la localidad gradense de Belandres negaron ayer haber provocado las llamas. La letrada de los acusados, Elena Arrieta Madiedo, defendió ante la magistrada del Juzgado de lo penal número 2 de Oviedo que no hay prueba alguna de que los acusados causasen el fuego, salvo que los dos focos detectados por las Bripas estaban cerca de sus fincas y ellos habían estado trabajando ese día en ellas. El fuego afectó a una superficie de 2,77 hectáreas, la mayor parte desarboladas. El fiscal pide ocho meses de prisión y 5.600 euros de indemnización.