Altas se escuchan las voces de muchas mujeres y asociaciones cuando de repente algún/a insensible (o quizás insensato/a) expone un anuncio donde la mujer es tratada como un objeto.
Pues bien, estando más que de acuerdo en la repulsa hacia tales anuncios, no puedo olvidarme de las pocas veces en que sucede lo mismo cuando el tratado como objeto es el hombre.
Sea vergüenza o sean otras las razones, pocas veces se alza la voz para criticar estos casos.
En esta ocasión he decidido que es necesario alzar la voz. Porque al igual que no se puede tratar a la mujer como objeto, no se puede hacer lo mismo con el hombre. Y la razón no es otra que la campaña de publicidad de una página web donde nos invitan a adoptar un tío, que en esta ocasión ha llegado a las marquesinas de nuestro Oviedo.
En estos anuncios, que si bien no exhiben carne, se emplean unas ilustraciones bien clarificadoras: una señora que lleva un carrito de la compra en el cual lleva a su tío.
Como si la señora en cuestión pudiese pasarse por el supermercado y comprarse un tío, el anuncio no es explícito en los términos habituales de la sociedad actual, pero sin duda es una clara falta de tacto y de dignidad hacia cualquier persona: tanto hombre como mujer.
Porque no lo olvidemos, al igual que la mujer se merece respeto no podemos olvidarnos que en el sentido inverso debe mantenerse el mismo respeto.
Y éste no es sino uno más de los ejemplos de cómo esta página/empresa convierte a los hombres en objeto (no en vano, si miramos el título de esta página en internet, pone: Hombres-Objeto para mimar).
