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Entrenador de fútbol

Que esta tragedia no sea en vano

Algunas de las cosas que deberían cambiar en el fútbol para practicarlo con más seguridad

Me niego a pensar que la muerte de Hugo fuera en vano. Tengo ficha federativa desde hace casi cuarenta años ininterrumpidos, primero de jugador -desde infantiles hasta la Segunda B, militando en innumerables equipos- y en la actualidad como entrenador con titulación de categoría nacional y opino que es muy probable que no se podría haber salvado la vida de Hugo ni con un examen más exhaustivo en las revisiones médicas de la Federación ni si hubiera habido un desfibrilador en el fatídico campo de Santo Domingo, pero aún así me niego a pensar que la muerte de Hugo fuera en vano, y si después de esta tragedia se consiguiera que alguna de estas cosas fuera obligatoria, daríamos un gran paso adelante en la seguridad de nuestros deportistas. Actualmente, son obligatorios los reconocimientos médicos para cualquier federado, incluidos los entrenadores, pero en vez de centrarse en detectar posibles problemas cardíacos, éstos van encaminados a desenmascarar lesiones articulares -tobillos principalmente- para evitar futuras operaciones que supongan un fuerte desembolso por parte de las mutuas contratadas por la Federación.

Debería ser obligatorio que todos los campos tengan un desfibrilador. Anteayer Hugo perdió su vida en un campo situado a 900 metros del Hospital San Agustín de Avilés; ¿qué pasa cuando juegan miles de niños y jóvenes por esos campos de Asturias y España todos los fines de semana a varios kilómetros de un servicio sanitario?

Nos pondrán excusas económicas, que son muy costosos, que no depende de la Federación Asturiana... y se limitarán a hacerle un homenaje póstumo al bueno de Hugo, pero me niego a pensar que su muerte fuera en vano.

Desde mi etapa de jugador, cuando había elecciones a la presidencia de la Federación nos obligaba nuestro club a firmar un papel que ya tenía puesto el mismo nombre todos los años; si se te ocurría decir que no te gustaba ese candidato, tu presidente del club, el que te pagaba, te convenía para que lo hicieras ya que era "lo mejor" para tu club, que había recibido la firme promesa de una compensación en forma de futura subvención tan necesaria para las siempre maltrechas arcas de los equipos asturianos.

Luego los presidentes electos de todas las territoriales son los encargados de elegir al presidente de la Federación Española. ¿Alguien se pregunta a estas alturas el por qué de la perpetuidad de todos y cada uno de los presidentes de las federaciones incluida la española? Hay muchísimas cosas que se pueden cambiar.

Si por cada traspaso millonario que se hiciera en las ligas profesionales de fútbol se repercutiera más cantidad en el fútbol modesto, se podrían acondicionar los campos al siglo XXI dotándolos de equipamientos médicos básicos, por ejemplo, pero para esto tienen que cambiar muchas cosas y sinceramente en la actualidad soy muy pesimista.

Hoy es un día muy triste para mí, tuve el placer de entrenar a Hugo en un equipo de Regional Preferente y el próximo domingo quiso el destino que me tocara volver a enfrentarme a él, pero su banda estará huérfana de esa tremenda velocidad que tenía; sin duda, el jugador más veloz que nunca he entrenado, pero fue más rápida su vida y a sus 28 años su corazón ha dicho basta.

Hugo era un chico sano, normal, como los miles y miles que todos los fines de semana matan su gusanillo haciendo lo que tanto nos gusta y si no conseguimos que puedan hacerlo con unas mínimas condiciones de seguridad, lamentablemente la muerte de Hugo sería en vano. D.E.P.

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