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Concejala de IU en el Ayuntamiento de Avilés

Contra la inmoralidad

La política europea sobre los refugiados

Me hago eco de la argumentación política de Izquierda Unida, a la vez que mi grupo municipal vemos como el mas mínimo gesto la petición de retirada de la bandera de la UE de las estancias municipales, no ha sido recogida en nuestro Ayuntamiento para vergüenza de todos. Primero pedimos formar parte de la red de "ciudades refugio" como muchas otras de España: Madrid, Barcelona, Huelva, Córdoba, Almería, Gijón o Santa Cruz de Tenerife; hasta un total de 55, pero tampoco tuvimos éxito.

La alcaldesa de Avilés entiende que esta crisis solo puede solucionarse por vía de la "alta política" y los ejércitos, no por las infinitas muestras de solidaridad ciudadana, de las ONGs, que de forma altruista ayudan a paliar tanta desesperación. Así que vamos a explicar unos trazos de esa alta política, lo que son y lo que no están consiguiendo.

La mayor maquinaria de guerra de toda la historia, la OTAN, interviene desde una vergonzosa impunidad en los conflictos bélicos, esos que matan, mutilan y desplazan a millones de personas inocentes desde Afganistán a Siria, Libia o Yemen en un largo etcétera plagado ataques a los derechos humanos. La respuesta de nuestros gobernantes son una vez más indecentes, partícipes necesarios de las políticas mas vergonzantes desde la época del nazismo, cooperando, negociando y mercadeando con la vida de millones de seres humanos. Vergüenza, vergonha, shame, vergonya, skamde, turp, lotsa...

El conflicto sirio esta provocando el desplazamiento de once millones de personas hasta el momento. De ellos, cuatro millones han salido de su país y se han trasladado a Jordania, Líbano o Turquía. Sólo en el Líbano, hay un asentamiento de más de un millón de personas refugiadas según datos de Amnistía Internacional. Para hablar de la guerra en Siria hay que hablar de cómo los regímenes saudí y otros gobiernos monárquicos del Golfo Pérsico han apoyado con dinero y petróleo a los seguidores suníes del llamado Estado Islámico, apoyados por Israel y Turquía, que no ha tenido reparos en permitir los traslados de mercenarios y armas a través de su territorio. La UE y sus estados tienen la responsabilidad de cada crimen que sus aliados cometen con esas armas que les han vendido, España entre ellos. No hace falta ver las fotografías ni los vídeos de la catástrofe humanitaria a la que asistimos, no hace falta ver programas de televisión de Javier Bauluz para que nos invada el dolor y la rabia. Recordemos nuestro propio éxodo, allá por los años de Guerra Civil y los años negros de la dictadura. Por eso, no puedo entender que algo tan simbólico como la retirada de una bandera de esa UE xenófoba, racista y cruel no sea entendido por gobernantes municipales como en el caso de la alcaldesa de Avilés.

Las muertes en aguas del Mediterráneo convierten el "mar de la cultura" en un enorme cementerio. Las imágenes en Idomeni, Grecia, las tiendas de campaña, la intemperie, el frío, el barro, las mujeres pariendo entre frío y calamidades, muriendo entre toses, fiebre e inanición nos golpean día tras día. Estas familias que piden refugio en Europa no huyen de una catástrofe natural, huyen de la guerra que ha destrozado sus casas, sus escuelas, sus hospitales. Hace seis meses, Europa se repartió 160.000 personas (como si de un mercado de abastos se tratase) de los que 17.680 corresponderían a España, aunque nuestro gobierno "en funciones" nunca se comprometió a recibir mas de 50, de los que finalmente han llegado 18 personas. Patético, penoso, impresentable.

Las políticas ultraderechistas europeas nos llevan a los horribles tiempos prenazis de los años 30: Dinamarca, Holanda, Polonia, Hungría... En España tenemos el "honor" de haber puesto las primeras concertinas en la frontera y hemos hecho las primeras devoluciones en caliente. El fantasma del fascismo nos invade. Enterramos bajo la muerte de tantos inocentes; la Europa de los Derechos Humanos y de la cultura. ¿Pueden 6.000 millones de euros pagar nuestra ignominiosa desafección a la humanidad?

No queremos resignarnos. Vamos a seguir luchando desde nuestro espacio, con nuestras fuerzas, con el coraje que nos transmiten desde el mismo infierno personas que ayudan de forma altruista, mientras esos gobernantes que no nos representan, vestidos con trajes de 2.000 euros, en hoteles de 5 estrellas, rodeados de un lujo vergonzoso, subastando la vida de inocentes. Esa UE que atenta contra los Derechos Humanos en materia de asilo y acogimiento de refugiados/as. La Europa a la que nosotros no queremos pertenecer.

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