La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Dos pingüinos por el Juzgado

Crónica del corresponsal en los tribunales de Avilés J. Tribulete

Los servicios de seguridad de los Juzgados de Avilés andan preocupados por la aparición de dos Pingüinos Lanudos que fueron vistos entre el público a primera hora en el patio de las salas de audiencia. El responsable del servicio, el Sr Aldés, alias el coronel, manifestó haber recibido noticia acerca del avistamiento, asegurando a los presentes haberse personado en el lugar sin que advirtiera presencia alguna y que lo único que pudo advertir fuera que las gentes que allí esperaban ingratamente su turno, vistieran gruesas capas de abrigo, bufanda y guantes. En cualquier caso advirtió que seguiría investigando y bla, bla, bla.

A eso de las doce horas un grito desgarrador, procedente de los baños de la edificación, puso los pelos de punta a los bancos de espera de los aledaños. Al parecer una señora, que acompañaba a su vecina cuya hija debía declarar acerca de unas manchas de lejía que ignotamente aparecieron en sus toallas de color puestas a secar en el tendal, aquel que quedaba bajo el de su vecina arpía del sexto. Pues eso, que la señora grito de tal manera, tras intentar lavar sus manos en el lavabo de los baños. Al lugar del hecho acudió el señor médico forense de guardia en evitación de lesión por congelación en dedos de la extremidad superior.

A última hora de la mañana, el Sr Aldés, en rueda de prensa, aseguró que la especulación acerca de tratarse de dos letrados a los que la toga les quedaba estrecha nada tenía que ver con el asunto y que los testimonios recabados apuntan hacia la teoría del pingüino. El asunto pasa a los servicios de protección de animales del principado y al Juzgado de instrucción de guardia, por si de la ocurrencia del hecho pudiera desprenderse conducta penalmente reprochable. Asturias paraíso natural.

Compartir el artículo

stats