Salas es un extenso concejo de fuertes contrastes y territorios, y por tanto con interesantes recorridos para lo ciclobikers, y más desde que los aficionados a la btt de la zona están realizando interesantes quedadas endureras, así como ciclomontañeras por las tierras salenses.
En esta ocasión nos hemos acercado a Salas, con la idea de hacer una ruta en base a dos grandes bucles sobre la villa de Salas aprovechando el pasillo que nos da el Camino de Santiago, que nos dieran una cierta idea y dimensión de lo que es el valle central salense.
Se sale pues de la propia villa de Salas, y lo mejor aunque parezca un tanto raro, es bajar por la calle principal abajo hacia el Este, hasta Minesa, y allí girar a la izquierda y por la Ermita de Santa Ana subir hacia Villamar de Arriba para llegar de forma más cómoda a la Ermita del Viso ya que todo ese trazado se hace por pistas amplias y las pendientes son más suaves, quedando por tanto la zona más técnica desde el Viso para la bajada, sino se realiza así, les pasará como nos sucedió a nosotros, tener que tirar de la trotona bastante trozo hasta concluir en la Ermita del Viso. En todo caso se haga por donde se haga la Ermita del Viso es un auténtico mirador sobre el valle de Salas y sus contornos.
Tras regocijarnos un buen rato con las estampas que nos ofrecía el mirador, nos vamos por un lateral de la ermita octogonal, cosa bastante curiosa el tema poligonal, y por una estrecha senda se rueda unos instantes hasta una amplia pista de explotación maderera por la cual se baja frenéticamente como hacia Salas, para después girar en redondo, para ir dando vuelta al promontorio donde está enclavada la ermita y que se recorre siguiendo el PR.AS 131 en dirección norte (5,9 km). La ruta deja la pista principal para irse hacia otra más baja que nos devuelve al rumbo Sur para encarar el descenso final hacia la aldea de Villamar de Abajo en primer término, y luego hacia Villamar de Abajo, cruzando para ello la AS-225, yendo a buscar la Ermita de Santa Ana, y volviendo de este modo a situarnos en lo más fondero del valle con unos 10, 5 km rodados.Ya en la carretera y calle general de entrada a Salas, cruzamos ésta y el río Nonaya para ir virando al Este hacia la casona de La Debesa, tan bella y cuidada, desde la cual se parte por caminos que nos llevan hasta la localidad de Casazorrina, entrando desde la misma Debesa en los predios del Camino de Santiago, cuyo transito se pega al río Nonaya, por una especie de sendero "float" hasta entrar en Quintana (14, 7 km) a través de Casa Moxil.
En este punto el segundo bucle se va rumbo Sur emprendiendo una fuerte subida por encima de las Lleras de Abajo y de Arriba. El camino coge altura para ganar lo alto de la cordal, y ya bastante arriba darle vuelta a la sierra dando vista al otro valle que se recorre por la parte superior volteando de nuevo al valle de Las lleras antes de perder de vista el caserío de Casazorrina. Se sigue por Pineagua para ya encarar rumbo Norte, y bajar por un lateral de la cordal de Monteagudo en busca de la aldea de Villaraba.
Al tocar conectar con el acceso rodado que viene de Villaraba, se vira a la derecha para coger un camino que nos llevará hasta las casas de Monteagudo, se circula a cierta altura del valle regado por el Nonaya al cual se llega descendiendo hacia la localidad de Llamas, donde ya el personal ciclo biker se rindió, poniendo proa hacia Salas por Villazón donde se recobra el Camino de Santiago, y de nuevo volver a ciclar la ruta en sentido inverso hasta La Debesa, desde donde se entra en Salas en unos minutos.
