Algo está cambiando en el baloncesto asturiano. Las selecciones autonómicas cada vez juegan más partidos y eso se está notando cuando salen a competir con otras regiones fuera de Asturias. Aún falta mucho trabajo por hacer, pero ahora se compite más y mejor. Lo dicen los resultados de los últimos años y lo refrenda el director técnico de la Federación Asturiana de Baloncesto, Alfredo Riera: "Este año, en el campeonato de España infantil y cadete que se celebró en Huelva, me fui con una sensación contraria a la de otros años. Otras veces me parecía que nos cuesta salir de Asturias y que estábamos por debajo de nuestro nivel. Este año me pareció que estábamos a nuestro nivel e incluso mejor, peleando con equipos en teoría muy superiores a nosotros".
Es verdad que la selección infantil femenina no pudo mantenerse en categoría especial y descendió a preferente. Pero también lo es que se jugó la permanencia nada menos que con Andalucía. Y que se logró competir con ellas (al inicio del tercer cuarto se pusieron un punto arriba), aunque las andaluzas terminaron por imponer su superioridad. Al final, la selección infantil femenina acabó novena de España y perdió la categoría tras caer por 47-63 ante el equipo andaluz. "Compitieron muy bien. Les faltó algo de suerte, perdieron a dos jugadoras por una gastroenteritis y a otra más por lesión; pero aún así han sido capaces de plantar cara a comunidades como Castilla y León, País Vasco, Canarias o Aragón", señala Riera.
El equipo de chicos de esta categoría infantil fue quizás una de las sorpresas más gratas. Una generación que no venía cosechando grandes resultados y que rindió muy por encima de lo esperado en el campeonato de España de Huelva. Tanto que llegaron a jugar para subir a categoría especial ante una Cantabria que llegaba con una de sus mejores generaciones. Y ante un equipo que les había ganado de 30 ó más puntos cada vez que se habían enfrentando, los chicos lograron luchar y caer finalmente por diecisiete puntos (73-56). "No contábamos con llegar tan lejos en esta categoría, esto demuestra que estamos aprendiendo a competir", añade Alfredo Riera sobre el papel del infantil masculino.
También el equipo cadete femenino se jugó el ascenso a categoría especial. La pena fue que no lograron el primer puesto de su grupo tras caer por cuatro puntos (60-64) ante Extremadura. Eso hizo que las asturianas se jugaran el ascenso ante Aragón, un equipo muy difícil de batir. "Les faltó la victoria ante Extremadura, pero aún así dieron un paso adelante y estuvieron cerca de lograrlo", explica Riera. En el choque ante Aragón cayeron por un claro 67-40 mientras que Extremadura ascendió tras imponerse (57-69) a La Rioja.
Pero quizás la mayor alegría de todo el campeonato fue el ascenso a categoría especial del equipo cadete masculino. Una categoría muy complicada, en la que las selecciones más fuertes llegan reforzados con fichajes y en la que el nivel físico marca mucho la diferencia. "Tenemos una generación que es de las pocas en Asturias que físicamente no es mala. Teníamos opciones de subir, pero sinceramente yo no contaba con ello. Competíamos con selecciones como Galicia y Baleares por ascender, regiones con más habitantes y más tradición que la nuestra. Lo hicieron muy bien y compitieron mejor cuando era más importante", señala Alfredo Riera. Al final, en el enfrentamiento ante Baleares se impusieron por 79-72 y dieron la gran alegría a Asturias, que el año que viene volverá a tener a un equipo en la máxima categoría. Un satisfecho Riera destaca de este grupo la buena actuación de jugadores que serán el futuro del baloncesto asturiano en no demasiado tiempo. "Miguel González y Alonso Meana dieron un paso adelante y lideraron el equipo".
