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El basket tiene futuro

Los avilesinos Sara Lorca, Jorge Zardaín y Adán Potesta participaron con las selecciones asturianas alevines en el Campeonato de España, donde hicieron un buen papel

Los tres seleccionados, con sus medallas. LNE

Tres avilesinos se estrenaron esta temporada con la selección asturiana de baloncesto alevín. Sara Lorca Garrido, Jorge Zardaín Monforte y Adán Potesta González participaron hace unos días en el Campeonato de España de mini basket, que se disputó en San Fernando de Cádiz. "La experiencia fue muy bonita", señalaron todos a unísono. De hecho, los tres confesaron que han vuelto del viaje con más ganas de entrenar y su objetivo es estar en la selección infantil -categoría a la que pasarán el próximo año-, lo antes posible.

Para Sara Lorca la experiencia fue muy especial. El combinado asturiano femenino consiguió un hito histórico para el baloncesto asturiano: hacerse con la permanencia en la categoría "especial", la máxima, después de lograr la octava posición y ganar dos de sus cuatro partidos. "Cuando acabamos el partido ante Aragón que ganamos, nos fuimos hacia la grada a celebrarlo. Hubo hasta lagrimas de emoción", explicó la joven jugadora, que juega habitualmente en el San Fernando. Antes habían perdido Andalucía, Madrid y Canarias, los tres favoritos, pero remontaron la competición ganando los dos últimos encuentros a Navarra y a las aragonesas.

En la grada, junto a los familiares, les esperaban también los integrantes de la selección masculina. "Los chicos estuvieron animando a las chicas y las chicas a los chicos, además hicimos algunas actividades juntos en los ratos libres", explican.

Ellos participaron en la categoría "preferente", la segunda, y lograron una meritoria cuarta posición. La selección masculina perdió contra los dos equipos que, a la postre, subieron de categoría, primero con Cantabria y ya en semifinales con Aragón, pero por el camino se deshicieron de Castilla-La Mancha y La Rioja. "El partido contra Castilla-La Mancha fue un partidazo", sentencia Jorge Zardaín, que también milita en el colegio San Fernando. "Íbamos perdiendo de diez en el penúltimo periodo y en el último remontamos y acabamos ganando por 8 puntos", recuerda Adán Potesta, jugador de Las Doroteas.

Los tres llevaban preparándose con entrenamientos de la selección casi desde el pasado verano, Jorge Zardaín incluso antes, ya que estuvo en varias convocatorias de la pasada campaña aunque no llegó a debutar en el Nacional. Esta competición, además de ser su debut, tiene algo muy especial, que no se volverá a repetir: los partidos se juegan en seis periodos de 8 minutos y es obligatorio que todos los jugadores de la selección participen en dos de esos periodos. Así, todos, los tres avilesinos y sus compañeros de combinado, fueron parte activa del buen papel del equipo.

Pero no todo fue pelar en la cancha. Las dos selecciones asturianas estuvieron seis días en la localidad gaditana. "Me quedo con todo, los partidos, el hotel, la comida", señala Jorge Zardaín. "Y la experiencia con los jugadores de otras comunidades", añadió Potesta. Y es que todas las selecciones se alojaban en el mismo hotel. "Hicimos muchos amigos", afirmó Sara Lorca. De hecho, ahora tienen un chat con un centenar de jugadores que participaron en el campeonato, a través del que siguen en contacto. También tuvieron oportunidad de encontrarle mascota a la selección, una manta-raya que habitaba en el estanque del hotel y a la que, según recuerda Adán Potesta, alimentaban a menudo.

En los ratos libres, aprovecharon para conocer San Fernando, pero también para ver partidos de otras selecciones, como los de la categoría especial masculina. "Los jugadores son muy altos, los hay de 1,90 y más altos, y son la mayoría", explicaron los avilesinos. A Sara Lorca, en la competición femenina, le tocó enfrentarse a algunas jugadoras de ese perfil. "También hay jugadoras que no parecen de nuestra edad. Mantenerse en especial no fue nada fácil", señala la jugadora. Los tres aprovecharon a pensar en el futuro del baloncesto español: "Hay dos jugadorazos Juan Núñez y Ab-Sediq Garuba, de la madrileña, van a llegar muy lejos. En los partidos de especial masculina había ya hasta mates", explicaron los tres avilesinos.

Se fijaron en el futuro, pero también en el pasado reciente, porque los tres tuvieron la oportunidad de hacerse una fotografía con el campeón del Mundo Jorge Garbajosa y, también con el presente, porque vieron en la grada a Juan Carlos Navarro, que estaba siguiendo a su hija en la competición.

Adán Potesta y Jorge Zardaín no se habían visto frente a frente en la cancha, pese a que están en equipos diferentes. "Estamos en diferente grupo", explican. Ahora, Potesta y Sara Lorca están disputando con sus colegios la Copa de Asturias y el pasado fin de semana dejó un momento muy bonito. "Nos encontramos de nuevo con los compañeros de selección y ya son como de nuestro equipo", explicó Sara Lorca.

Cada uno comenzó en el baloncesto por motivos diferentes. El más rápido en decidirse fue Adán Potesta. "Lo vi por la tele, me gustó y enseguida le dije a mis padres que quería jugar al baloncesto -su madre apunta que tenía dos años-. Veía un balón de lo que fuese y lo botaba", explica el jugador de las Doroteas, que tiene previsto jugar en el Sanfer la próxima temporada, al no haber equipo infantil en su colegio. A la jugadora avilesina, el baloncesto le llegó "por aburrimiento": "Me vio una entrenadora tirando unas canastas mientras 'veía' a mi hermano jugar al fútbol y me invitó a que probara con ellas que estaban entrenando, pero también me convenció mi tío", recuerda. En el caso de Jorge Zardaín, la cosa le vino de familia. Su padre es aficionado al baloncesto y su hermana mayor ya entrenaba en el deporte de la canasta cuando el comenzó a jugar.

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