Hacía varias décadas que en Bimenes no salía una figura de la canción asturiana. Desde la época de Armando Montes, un yerbato de El Cirgüellalín que comenzó a canturrear a la sombra de Peña Mayor y acabó llevando los nombres de Asturias y Bimenes por numerosos países de Europa y América con gran éxito. Pero una nueva perla está brillando con fuerza en el panorama musical asturiano dispuesta a dar mucha guerra, nos referimos a Alicia Villanueva, la joven cantante de San Julián de Bimenes que lleva tiempo asombrando a propios y a extraños pese a su corta edad.
Alicia desde su más tierna infancia tenía claro que lo suyo era la tonada asturiana, y en eso invirtió su tiempo. Desde entonces lucha, se esfuerza, se prepara, no desfallece, ensaya y canta, siempre bajo la batuta maestra de su mentora: la gran Anabel Santiago. El vigor y el genio lo lleva en los genes, pues ya su bisabuela Julia Llamedo -a quien conoció- destacaba por su afición a la canción, al baile, a los romances y a los dichos populares. Quienes acuden a sus actuaciones tienen la oportunidad de valorar su capacidad natural para transmitir sensaciones y sentimientos, su espontaneidad no pasa desapercibida, y cada inflexión de voz genera una expectación propia de alguien que va camino de convertirse en un nuevo emblema de la tonada asturiana; no en vano, en lo que va de año los galardones se van acumulando en sus vitrinas: Alicia venció en los concursos de tonada "Cuenca del Caudal", "Les Mines de La Nueva" y "San Martín del Rey Aurelio", y el colofón lo consiguió hace unos días al alzarse con el triunfo en el "Concurso y Muestra de Folclore Ciudad de Oviedo" en categoría juvenil.
Es consciente de que no puede desaprovechar los mimbres que lleva dentro, y que tantas horas de ensayos, kilómetros de carretera, fines de semana sin descansar, empiezan ahora a dar sus frutos; además, con todo el trajín que lleva aún saca fuerzas para llevar de forma brillante sus estudios académicos lo cual le confiere más mérito si cabe.
No me quiero olvidar de un gaitero con un futuro prometedor. Me refiero a Jorge Suárez Carbajal, con raíces yerbatas y vecino de El Berrón, subcampeón en la categoría absoluta en el "Ciudad de Oviedo"; por parte materna pertenece a una conocida familia de Suares, los Carbajal, quienes no olvidan sus orígenes y siguen teniendo un fuerte vínculo con su pueblo. Y a Carlos Velasco Montes, de Suares y ahora residente en Carbayín, clasificado en tercer lugar en la modalidad de tonada asturiana.
Felicitaciones a los tres. Ahora que abunda el ensalzamiento de festejos con aires foráneos -tan ajenos a nuestra idiosincrasia- es de justicia agradeceros el empeño que hacéis por defender la cultura asturiana y llevarla al lugar que se merece.
