Comida navideña. Diez comensales. Ninguno político profesional o vocacional. Aunque cada uno tiene sus ideas y son variadas. La media de edad supera los 50. La conversación, irremediablemente, acaba en el resultado electoral. Se palpa gran inquietud. ¿Habrá Gobierno? Se cruzan las conversaciones. A Rajoy no le salen los números. Ciudadanos se quedó corto. Pedro Sánchez lucha contra el adversario externo e interno. Su pacto debe incluir partidos independentistas, demasiado peligroso. Podemos no quiere acuerdos. Habrá nuevas elecciones. Parece claro que los más beneficiados serán el PP, que abogará por la estabilidad y pondrá el desacuerdo como bandera, y Podemos, un partido en alza. ¿Y una gran coalición a la alemana? Sería la solución ideal. Pero los intereses partidistas la impiden. No somos Alemania. Pues habrá que ir pensando en serlo, coinciden la mayoría de los contertulios. ¿Opinan igual los jóvenes? La pregunta se mastica los postres.
