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Desde mi Mieres del Camino

Tista, un entibador de campeonato

El mierense Juan Bautista Álvarez se convirtió en una leyenda en los concursos mineros nacionales

Suenan ecos de antiguos cánticos en honor de la patrona minera. Estamos en plenas fechas de Santa Bárbara y el ambiente parece reverdecer de otros tiempos, cuando la actividad del subsuelo asturiano, en busca del oro negro (carbón), respondía a la autenticidad. Hoy solamente son adornos históricos que surgen de nuevo merced a la labor de esa extraordinaria plataforma que responde a la identidad de Asociación Cultural y Minera "Santa Bárbara". Hasta las montañas que circundan, en este caso la villa de Mieres, rompen su silencio con un simulacro de los "barrenazos" que antiguamente despertaban a la población minera dispuesta a festejar la efemérides.

Entre el conjunto de actos que ofrecían el programa sobresalía y aún sobresale la convocatoria del concurso de entibadores mineros que solía tener repetición en otras fechas de señalada celebración. Y con él, lo hacía, por aquel entonces y durante muchos años, más de cincuenta puesto que se inició a los diez y ocho años, con su pareja Pedro Padín, barrenista del Pozo Barredo, compañero en casi toda su trayectoria, menos la época de sus dos hijos José Manuel y Juan Bautista, nacidos del matrimonio con Matilde Fernández, junto con la hija María Cristina, para ganar en Langreo cuando en las convocatorias del concurso participaban de sesenta a ochenta parejas. Esto le hizo exclamar, a Manuel Félix, padre del gran pintor y escultor de la mina, José Manuel Félix Magdalena, que era experto en la materia: "¡Son la revelación!".

Hablamos, claro está de Juan Bautista Álvarez Castillo, "Tista" para conocimiento y fama general, minero auténtico, aguerrido, vocacionado a la tarea y generoso en sus actuaciones. Había nacido en el barrio de La Villa, allá por agosto de 1925 y se fue de este mundo, también un mes de agosto, cuando veraneaba en Gijón, ochenta y nueve años más tarde, es decir en 2014. Y durante ese largo periplo su vida fue una constante trayectoria unida a la mina, puesto que ingresó a los dieciséis años en Mina Mariana y hasta su jubilación estuvo en permanente movimiento con la labor minera y en varias direcciones. Porque?

Antes de adentrarse en su afición y cualidades con la entibación, categoría que desempeñó tras la de vagonero para terminar como minero de primera, Tista protagonizó una etapa de veinticinco años como miembro activo de la Brigada de Salvamento Minero, llegando a ser considerado el mejor elemento de este famoso colectivo que, por su constante quehacer, alcanzó una fama legítima e increíble. De sus hazañas y teniendo a nuestro protagonista en primera fila, destacan hechos como la actuación en el Pozo Santiago de Aller, en 1974, cuando quedaron enterrados cinco compañeros que, rápidamente, fueron objeto de un intento de rescate por parte de varios mineros de la explotación, sin éxito, ya que habían fallecido asfixiados. La Brigada con Tista al frente solo pudo recuperar los cadáveres.

Pero no solamente fue la mina escenario de la gran labor desarrollada por la acción de este cuerpo, ya que también era demandado para otras labores, como ocurrió en el túnel de Congostinas (Pajares), línea de Renfe Asturias-León, cuando un tren quedó dentro averiado, llegando otra máquina en su auxilio que, por causas desconocidas, entró a todo gas en el túnel y chocando con el convoy con tal fuerza que provocó el hundimiento de la bóveda, grandes destrozos en el tren averiado y lo que fue peor, la explosión de setecientos mil litros de combustible que transportaba, siendo requerida la Brigada Minera que, con enorme y largo trabajo, solo pudo recuperar los restos de siete cadáveres que desgraciadamente fueron identificados merced a los objetos ignífugos que llevaban encima.

Juan Bautista Álvarez, "Tista", dada su condición de minero, respiraba ansias de libertad y democracia, lo que le llevó a ser simpatizante del Partido Comunista y afiliado a Comisiones Obreras, pero nunca fue un elemento de los considerados alborotadores. Su templanza y categoría lo llevaban por otros lares más serenos. De todas formas siempre supo dar la cara en los momentos de mayor tensión. Cuentan los hechos perfectamente verificados que cuando "la Huelgona" de 1962 se encontraba a la entrada de la mina con sus compañeros dispuestos a no comenzar la faena, presentándose allí el ingeniero jefe de Barredo, acompañado del comisario de policía gubernativa de Mieres. El primero se dirigió a Tista para manifestarle: "Si usted entra, lo hacen todos los compañeros". Por supuesto que Juan Bautista no obedeció la sugerencia. A la noche era detenido en su casa, ante la esposa e hijos, siendo deportado a Valladolid, donde permaneció tres meses.

La participación de Tista en los distintos concursos de entibadores no sólo de Asturias, sino también de aquellas provincias españolas donde el carbón era un sostén más de la economía, caso de León, Palencia e incluso Andalucía, creó una aureola de éxitos inigualables hasta culminar, durante cerca de veinte veces, en la definición de campeón de España de la modalidad, puesto que ese título se alcanzaba en determinados lugares donde la competición adquiría la máxima expectación, siendo Langreo, para Asturias, el lugar donde los concursos regionales podían alardear de esa vitola. Se da la curiosa circunstancia de que el primero que ganó Tista fue en Madrid, recibiendo el trofeo de manos del entonces Jefe del Estado, Francisco Franco, mientras que el último tuvo a bien recogerlo de manos del secretario general de CC OO, Marcelino Camacho, y que hoy se encuentra en manos de la organización sindical de Oviedo.

Durante el transcurso de estos torneos que, por cierto, tenían normalmente como anticipo el desfile de los participantes desde el Ayuntamiento hasta el lugar de desarrollo y en algunos casos de noche, con los casos puestos y las lámparas encendidas, surgían hechos y anécdotas que dejaban constancia de la condición minera, algunas veces traspasando líneas de desmesurada originalidad.

Eran los primeros tiempos de la dictadura franquista cuando, en una de las citas competitivas, era de obligado cumplimiento levantar el brazo y cantar el Cara a Sol, con la consabida frase final de ¡Arriba España! Tras su pronunciamiento se oyó una voz potente, de cierto personaje pintoresco que tomaba parte en el concurso que a continuación exclamó: "¡Y a mi en el culo me restalla!". No es necesario añadir detalles de las distintas reacciones que se produjeron, desde el asombro casi general, a ciertas sonrisas medio escondidas y por supuesto las consecuencias que para el sujeto en cuestión produjo su pronunciamiento no programado. Otro detalle destacado era la decisión de Fábrica de Mieres de doblarles la cuantía del premio en metálico cuando triunfaba en un concurso de altura.

En el bagaje personal de Juan Bautista Álvarez, "Tista", existe otro hecho destacable y es su parentesco con el religioso Fray Paulino Álvarez que, por cierto, tiene una calle en Mieres, precisamente la que continúa de Ramón y Cajal hasta la entrada al Pozo Barredo, donde Tista laboró tantos años. El nombre de este personaje no fue borrado del callejero mierense, pese a que cuando la renovación casi total de los nombres ilustres que figuraban en él, desapareció por decisión del nuevo régimen totalitario. Se desconocen los motivos. Sin embargo, según el historiador mierense que sigue publicando sus trabajos en LA NUEVA ESPAÑA, Ernesto Burgos, Fray Paulino fue un dominico nacido en Mieres, por el año 1850, autor de numerosas obras religiosas y biografías de santos, que resultó ser un activista de primer orden a favor del pretendiente a la corona española Carlos VII. Rector del monasterio de Vergara, llegó a ser nombrado Provincial de Andalucía, cargo que hubo de abandonar al ser declarado non grato en la corte, emigrando a Cuba donde siguió con su labor, tanto religiosa como política. Posteriormente, tranquilizadas las aguas en España, regresó a su patria, falleciendo en Palencia allá por mayo de 1939. Pues bien, Fray Paulino Álvarez era hermano de la abuela de nuestro hombre, Juan Bautista Álvarez, "Tista", un entibador de campeonato.

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