La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El bazar de la historia

Los orígenes de la Feria Astur-Galaica

El impulso de Alberto Masid y "Archi" López para crear el evento, antesala de la Folixa na Primavera

"Si hace años por algo era famosa Mieres, era es por sus fiestas". Aunque esta frase pueda parecer el típico tópico, en verdad es la pura realidad. La rica tradición fiestera hacía que en cada localidad del concejo hubiese una celebración mítica por excelencia. Con la llegada de la modernidad muchas fueron desapareciendo, y durante años en todo el casco de la villa sólo se celebraba San Juan. Pero últimamente se están empezando a recuperar las fiestas de barrio, como ocurre con las de Requejo y de Santa Marina, sin olvidarnos de las de nueva creación, como es la que se celebra en el barrio de Vega de Arriba y la recuperación de la fiesta minera de Santa Bárbara por parte por parte de la Asociación Cultural y Minera del mismo nombre. Incluso la imaginación de algunos políticos ha sabido inventar una fiesta como es la Folixa na Primavera y, del mismo modo, con mucha creatividad por parte mismo de algunos de nuestros ciudadanos, se creó la Feria Astur-Galaica.

Aunque en Mieres nos encanta sentarnos ante las mesas de las sidrerías, restaurantes, bares y demás locales, también tenemos unos pocos días al año para disfrutar la llamada "cocina de calle" gracias a la Feria Astur-Galaica. Esta idea surgió de Alberto González Masid y "Archi" López hace algo más de una década en las fiestas de San Juan, cuando este par de amigos se sentaron, por fin, a desayunar, el uno en frente del otro.

Alberto, que es de ascendencia gallega, nació en Ujo y se instaló en Mieres, donde trabaja, siendo un dinámico emprendedor, prueba de ello es que le propuso a "Archi" López organizar una Feria Astur-Galaica, dejando la puerta abierta para nuevas propuestas donde pudieran intercambiar ideas sobre su relación con Galicia -y la diferencia que hay entre ser gallego y galeguista-. El pensamiento de ambos era que al menos una vez al año los negocios aunasen sus esfuerzos para tratar de sacar a la gente a la calle sabiendo que contaban con un buen reclamo y que, además, cuando las cosas se organizan bien la gente suele responder, como así fue. Al lucense "Archi" la idea lo sedujo. Nunca el hecho de comenzar de cero los detuvo. Por el contrario, les parecía que eso fomentaría la creatividad y así se fue consiguiendo una feria consolidada.

A lo largo de todos estos años, esta cita ha logrado una gran repercusión en la comarca, siendo la antesala para la celebración de la Folixa na Primavera. Hoy podemos decir que más que feria se la considera a ésta casi como una fiesta. Solamente le falta el pregón, acto que suele ser uno de los hechos culturales más importantes las fiestas. Este pregonero tendría el honor de abrir la puerta simbólica del comienzo de esta fiesta.

Durante un fin de semana entero, Galicia y Asturias se hermanan en el parque de Mieres. Este magnífico jardín, como es el del Jovellanos, es un idílico recinto arbolado, que cuenta con áreas infantiles. Alrededor de la carpa habilitada por "Archi", se celebran diferentes actos como son: pasacalles, bandas de gaitas, verbenas, y más actividades que invitan durante tres días a dar una vuelta por la villa de Mieres. En esos días, la calle Aller acoge a decenas de expositores con diferentes productos típicos, gastronómicos, artesanos, etc. El certamen supone toda una oportunidad para descubrir la estrecha relación entre las ricas culturas asturiana y gallega.

Esta iniciativa cuenta con el apoyo de los hosteleros de la calle Aller, junto con la colaboración del comercio de la zona. Durante días es una fiesta multitudinaria, a la que acuden todos los años miles de personas y que se han convertido en unos días diferentes, no sólo para la localidad sino también para nuestro concejo y algunos más.

En esta carpa del parque Jovellanos, se cocinan diferentes platos gallegos, siendo el más característico el "pulpo a feria", un manjar que tradicionalmente preparan las famosas pulpeiras en sus ollas de cobre. Quizás este sea el plato más conocido o el que más guste de la cocina gallega. Pero en la feria no sólo se come pulpo, ya que el encuentro sirve también para promocionar lo mejor de la gastronomía gallega. Degustándose gran cantidad de kilos de carne, patatas, pan de Galicia y las típicas empanadas que se consumen durante esos días, sin olvidar la tarta de Santiago.

Cocinar un buen pulpo "a feira" es un arte que llevan haciendo las "pulpeiras", aunque hoy en día también hay "pulpeiros". Desde tiempos remotos, que se han ido pasando la tradición de generación en generación sin perder ese toque especial que lo hace único.

En un principio se cocinaba el pulpo exclusivamente en ollas de cobre, pero actualmente se está introduciendo ollas de acero inoxidable, más manejables y fáciles de limpiar que el cobre. Este pulpo se servía y se sigue haciéndolo en platos de madera que se utilizaban porque eran más prácticos, pues no se rompen. En las ferias de ganado únicamente se comía el pulpo a feira (o pulpo a la gallega) acompañado de pan y de vino de la tierra. El cachelo (patata cocida), llegaría más tarde.

Como hecho curioso podemos citar que la presencia de gallegos en Mieres viene desde hace muchos años y algunos medios de diferentes épocas recoge en sus páginas reuniones de gallegos para comer el pulpo o realizar alguna "queimada".

La comunidad gallega siempre estuvo muy unida y como consecuencia de esto vemos en el mes de noviembre de 1931 que fue inscrita en el Registro Asociaciones del Gobierno de Asturias el "Centro Gallego de Mieres". El Centro Gallego nació como un punto de encuentro de las y los centenares de gallegas y gallegos que, en aquellos años, residían en la comarca del Caudal.

Con motivo de esta inauguración, visitaron nuestra villa el grupo de coros "Da Terra" que durante un fin de semana desfilaron por las calles de Mieres, vestidos con el traje gallego, siendo muy aplaudidos durante sus pases. En su estancia y en visita oficial, fueron recibidos por el alcalde, quien en un improvisado discurso les dio la bienvenida. En esa misma noche los visitantes gallegos dieron dos conciertos en un teatro local. Decían que el "Centro Gallego" nació en Mieres (casi la tierra de los gallegos o por lo menos donde se sentían como en casa) por la necesidad de escucharse los unos a los otros en el dulcísimo idioma galaico. En aquellos años ir a Galicia significaba muchas horas de viaje, lo que provocaba entre estas gentes la llamada "morriña".

Estos, en junta general celebrada en enero de 1932, realizaron el nombramiento de los nuevos cargos, siendo elegidos como presidente, Segundo Fernández; vicepresidentes, Antonio Castro y Avelino Fernández; secretario, Manuel; tesorero, Servando Rodríguez; contador, Ceferino Pérez; y vocales, José Ferro, Julio Iglesias, Benigno Rodríguez, José Chouza, Manuel López y Rafael Camero. En esa misma junta de socios acordaron la construcción de un edificio para albergar su sede y la realización de una Caja de Socorros. Esto no se llegó a realizar debido a los acontecimientos que después se dieron en la historia de nuestro país.

La sede de social de este grupo de gallegos radicó en el local de Casa Valerio (su propietario era Valeriano Vázquez), situado en la esquina de la calle Teodoro Cuesta con Guillermo Schultz de Mieres. Entre las actividades de casa Valerio, estaba el original concurso de rana, siendo los ganadores premiados con diferentes obsequios y en las épocas de toros los galardones consistían en entradas para los festivales taurinos de Mieres, Gijón y Oviedo. Sobre la mítica Casa Valerio comentaremos que, en el año 1961, sería traspasada y pasaría llamarse bar Madrid.

Hay un dicho que decía "que el mejor pulpo de Asturias se come en A Fonsagrada". Yo me atrevo a decir que estos días, el mejor pulpo se comió en Mieres.

Compartir el artículo

stats