En coincidencia con la festividad del Día de Todos los Santos, me llega también la "multa" anual que desde hace tiempo me llega del Ayuntamiento de Langreo. Es una herencia del anterior, pero que les vino de perlas, asumiéndolo con gusto. En pura teoría lo justifican como "Conservación y mantenimiento" de los cementerios.
Uno lo sufre, al igual que tantos y tantos que a diario me lo comentan, aunque no hace ninguna falta, dado que muy a menudo, sin necesidad de la casi obligatoria visita del día 1, para "cumplir" y hasta el añu que vien, frecuento a menudo el de Lada, donde tengo mi último "apartamento", además de visitar otros de personas con las que tuve grado de amistad. Vamos a ver; si ya resulta increíble, que como no tienen donde estrujar más a los sufridos contribuyentes, sacaron de la manga -ya ni a los muertos se respetan- este impuesto, que hasta podría ser comprensible si se vieran resultados palpables, pero resulta todo lo contrario.
Varias veces he tocado el tema, y aunque ignoro como están los de todo el concejo -aunque me apuntan que muy mal- me refiero al de Lada, donde hasta hace cuatro días, la maleza campaba a sus anchas, la limpieza brillaba por su ausencia, y, sobre todo, el intentar acceder a su parte alta requiere ser alpinista avezado, con escaleras destrozadas, rampas colonizadas por el verdín, o basura acumulada desde el añu la pera.
Pero, ¡milagro! De repente, y cual sucede en vísperas electorales, por arte de magia, le han dado un leve meneo, seguramente para que los que aparecen una vez cada... comprueben que toda va muy bien, y cumplen.
Me pregunto, nos preguntamos, a dónde van los ingresos que teóricamente deberían ir al fin que en principio se nos vendió como tal.
Vergüenza ajena sentimos del total abandono, cuando con lo recaudado deberían estar como una patena durante todo el año, y no acordarse ahora, para aprisa, y corriendo, lavarle la cara con fina capa cosmética.
La pregunta no es otra de ¿Qué va a pasar cuando pasen estas fechas?, la respuesta parece fácil: volveremos a más de lo mismo, y dentro de un año otro poco de maquillaje, y todas las porquerías posibles seguirán campando libremente por los camposantos. Lada es la muestra.
