La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Mi último partido contra el Sporting (por ahora)

Sobre la necesidad de los enfrentamientos entre los eternos rivales de la región

Yo asistí al último derbi. Esta frase con las variantes del vi o viví en lugar de asistí, terminaron por convertirse en una especie de epitafio para quienes quisieron ver el final definitivo de un equipo que habiendo perdido la categoría por méritos deportivos, fue descendido a Tercera División por causas administrativas. Todo ello mucho más de lo que un equipo como el Real Oviedo en situación desesperada en lo económico y en lo deportivo parecía poder soportar.

Yo asistí al último derbi (por ahora) en un día en el que la ciudad celebraba la feria de Ascensión (en Llanera) y en compañía de Gabino de Lorenzo, que por el momento parecía haberse dado cuenta de que la afición no iba a ser pacífica en el deseo manifestado por él de refundar el club. Asistió en el palco al primer tiempo del partido y tuvo que ausentarse en el descanso para acudir a celebrar en Llanera la feria. Eran fechas de elecciones. Perdíamos uno cero en ese momento y en la segunda parte el Real Oviedo dio vuelta al resultado y los aficionados quisimos ver una luz de esperanza en una posible remontada que nos librara del descenso. No fue posible.

Yo asistí al último derbi (por ahora). El inexorable paso del tiempo, con la ruleta de la vida en marcha, nos presenta para la temporada próxima una nueva ocasión de disfrutar un derbi. Ojalá tengamos ocasión de disfrutar de muchos más. Quiero, deseo, necesito la rivalidad. Quiero que el Real Oviedo esté siempre por encima del Sporting y si no puede ser, que el Sporting esté por debajo del Real Oviedo. Pero quiero a los dos cerca uno del otro. Yo sí creo que Asturias puede permitirse tener dos equipos en Primera División y como ya ocurriera en otra ocasión, ambos jugando en Europa. Claro que es perfectamente posible reencontrarnos de nuevo en el aeropuerto a la vuelta de jugar en Europa y que haya más suerte que en la anterior, con los dos equipos clasificados.

Yo asistí al último derbi (por ahora). De todos modos, y bajando de nuevo a la realidad, la próxima temporada en el fútbol asturiano ambos equipos se juegan dos competiciones, la Liga y terminar clasificado por encima del rival, lo cual no deja de constituir un estímulo añadido en una competición que cada vez más necesita de nuevos argumentos que hagan aumentar el interés del aficionado. Ni el VAR ni el bar van a ser suficientes.

Compartir el artículo

stats