La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

"Tamos en deuda"

El lamentable olvido de Gijón al alcalde Palacio

Cuando sin cumplir siete años ingresé en el colegio de la Inmaculada, apenas conocía la city, salvo las calles de La Merced, Instituto, Jovellanos, Munuza, General Solchaga y el Parchís, Somió, Cimadevilla y la ciudad residencial de Perlora, a la que en el Carreño íbamos los domingos a la playa de Carranques. A medida que fui pasando de curso y dejé de ir como "pipiolo" en autobús, fui ampliando mi radio de acción y los aledaños de los jesuitas los llegué a conocer como la palma de la mano.

Por aquel entonces, salvo la calle de San José, toda aquella barriada parecía territorio comanche, con charcos innumerables, barro, puticlubs, iglesias protestantes, casas míseras, gente vareando colchones, carbonerías, zapateros remendones y quioscos que ofertaban: "se cambian novelas rosas y del oeste". Mi querencia por aquella desdichada zona era debida al campu Los Fresnos, en el que llegué a jugar con el Inmaculada y en el que vi al Calzada, al Pelayo, al Somió, al Atlético Gijonés...

En 1977, con las primeras elecciones democráticas (pues cinco lustros de mi existencia los viví en dictadura), fue elegido alcalde José Manuel Palacio, quien renovó mandato hasta 1987. Este primer alcalde de la democracia, que por fin, me tocó vivir, diseñó el Plan de Ordenacion Urbana y el Cerro de Santa Catalina y puso todo su empeño, y a fe que lo consiguió, en asfaltar los barrios y en invertir, con criterio, en dónde mas urgentes eran las necesidades.

Esta ingrata ciudad parece que le ha olvidado y ello a pesar de que, tras el último adiós en la repleta iglesia de los Carmelitas, a la que acudí en la grata compañía de Peltop y de Francisco Prendes Quirós, todo el mundo alababa en el anegado Paseo de Begoña, el buen hacer de este, sin duda, discreto prohombre que como León Felipe en su exilio mexicano, murió "pobre, viejo y feo".

Señores ediles. Si tienen memoria y conocen algo de esta capital marítima, hagan justicia de una vez con el gran alcalde para el pueblo que fue José Manuel Palacio. Es indudable que a él, sí, "la historia le absolverá ".

Compartir el artículo

stats