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Presidente de Nuevas Generaciones de Gijón

Mucho más que un equipamiento

A propósito de la residencia universitaria como motor y elemento dinamizador

El próximo 21 de abril más de 25.000 miembros de la Universidad de Oviedo elegirán a quien será el futuro rector de la institución académica para los próximos cuatro años. Cuatro años que vendrán marcados, buen gobierno mediante, por una recuperación de la financiación ya pactada gracias a los acuerdos políticos impulsados por el PP durante los años 2014 y 2015, y por la lucha de la entidad universitaria frente a la crisis demográfica que atraviesa Asturias, la cual le ha hecho perder en una década casi un tercio de sus alumnos.

A modo de apuntes generales, quien ocupe el sillón de Rector de la Universidad de Oviedo tendrá que lidiar con una nueva manera de entender la educación y, por tanto, toda la actividad universitaria. La inclusión de la empresa privada dentro de los proyectos investigadores de la universidad y la formación en el emprendimiento deberán ser dos de los pilares de la institución. También, quien tome las riendas, deberá replantearse el funcionamiento y reparto de los grados en las tres ciudades con campus universitarios, la inclusión de nuevos posgrados adaptados a Bolonia y la implantación de nuevos proyectos en el campus de Mieres, el cual apenas acoge a 1.000 estudiantes frente a los más de 5.000 que podría mantener. Por último, pese a existir ya un marco de financiación, las relaciones con el gobierno del Principado y los grupos políticos tendrán que llevar al nuevo Rector a pactar un contrato-programa en base a objetivos que impulsen la labor investigadora y social de la Universidad.

En cuanto a la situación de la Universidad de Oviedo en Gijón, un asunto planea por encima del resto: la construcción de la residencia universitaria. Tras años de litigios, trabas burocráticas, pliegos y maquetas, nuestra ciudad todavía no cuenta con una residencia universitaria que dé cabida a todos aquellos alumnos que acuden a Gijón para formarse en la Escuela Politécnica de Ingeniería y en las dependencias universitarias de La Laboral. La dejadez y la mala planificación han logrado un extraño hito: que una ciudad con más de 5.000 universitarios no cuente con una residencia universitaria. El mandato de Vicente Gotor se salda con una reordenación de los espacios universitarios en nuestra ciudad, con la victoria judicial de la institución académica en lo referente a la llamada parcela de la "Semana negra" y con el fomento de nuestra ciudad como uno de los referentes de los posgrados en Asturias.

Sin embargo, todo impulso es en vano si Gijón es incapaz de captar y alojar docentes de otras partes del mundo o estudiantes extranjeros y nacionales que dinamicen la vida universitaria gijonesa.

Por otra parte, el gobierno local debe ser consciente de que ya no es tiempo para ocurrencias en lo relativo a la residencia, es el tiempo de actuar y lograr que Gijón cuente con una instalación clave para su futuro, cueste lo que cueste. La voluntad política siempre se sobrepone a los problemas con imaginación y empeño, sin embargo, todo hace pensar que los gobiernos socialistas y foristas de Gijón pusieron de todo en sus políticas universitarias menos empeño. Todos los candidatos tienen ideas interesantes para fomentar la relevancia universitaria de nuestra ciudad pero, por muchas que haya, todas pasan por la construcción de dicha residencia.

Estamos ante una oportunidad única pese al tiempo perdido. Fomentar la internacionalización de la Universidad de Oviedo en Gijón y su oferta formativa no solo es un avance para los jóvenes, sino que es un impulso a la vida social y productiva de nuestra ciudad. Apostar por atraer estudiantes y docentes es apostar por la llegada de nuevas ideas, por el desarrollo de nuevos proyectos en nuestra geografía y, en definitiva, por la revitalización de una sociedad gijonesa hastiada por el envejecimiento poblacional. Una residencia de estudiantes no es una mera infraestructura sino que es, a día de hoy, la clave de bóveda para cualquier proyecto de crecimiento universitario en nuestra ciudad.

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