Comentan que este primer semestre de 2016 ha sido el más caluroso desde 1880 que existen registros, y ocho de los diez años más calurosos de la serie histórica cotejada han tenido lugar desde 2006. El concepto de clima ya implica en sí cambio, tratándose de la dinámica -y por tanto evolución rápida- de las masas de aire dependiendo fundamentalmente de las temperaturas y las precipitaciones. Incluso hay polémicas sobre la extensión de los hielos árticos o la recuperación del agujero de la capa de ozono sobre la Antártida. Sobre el cambio climático siempre ha habido estimaciones, pues se trata de tendencias y de algo aproximado, no una ciencia exacta como las matemáticas, de otra manera podrían preverse las sequías, inundaciones y huracanes con mucha mayor antelación y precisión. En ocasiones los defensores y detractores de la teoría del calentamiento global negativo por la acción humana han quedado en entredicho, por la mayor inexactitud cuanto más distorsionadas estén por los prejuicios e interferencias ideológicas. El caso más llamativo fue el del ex vicepresidente norteamericano Al Gore, que cobraba -y no barato- por sus conferencias denunciando el calentamiento global y el derroche de energía, y resulta que iba a dar las conferencias en su jet privado, ¿cuánto consumiríamos si cada cual tuviera un jet privado? Sí parece contrastado que en el siglo XIX hubo una pequeña "edad más fresca" y en este siglo XXI asistimos a una "etapa más templada". Por su latitud y turismo España es precisamente uno de los países más afectados.

El calentamiento hace unos 10.000 años fue muy positivo, e impulsó el paso del Paleolítico al Neolítico, y con ello la vida sedentaria fuera de las cavernas y la economía productiva. Entre las causas actuales están la actividad industrial, el consumo energético y la contaminación humana, que al provocar una mayor densidad aérea por la polución crean un efecto invernadero, evitando que rayos de sol reboten y escapen a la atmósfera exterior, con lo cual ejercen a modo de escudo, calentando los volúmenes de aire que envuelven la tierra en las capas bajas de la atmósfera. En realidad un aumento de temperatura estival de dos o tres grados vendría bien para el turismo en Asturias.

¿Cuál es el clima ideal? No hay ninguno perfecto y dependiendo de la actividad económica unos pueden ser más positivos y otros más negativos, según hablemos de la agricultura, industria o turismo. Un clima que estuviera algo por encima de los 20 grados de media en verano y de los 10 en invierno sería ideal desde el punto de vista turístico, pues suelen considerarse climas cálidos por encima de 20 de media, templados entre 5 y 20 y fríos por debajo de 5 grados.

En Gijón tenemos unos 19.5 en julio y agosto y en torno a 9 en enero. Así pues en este sentido para Gijón sería muy positivo un aumento de un par de grados en las próximas décadas. El problema lo tendrían en el sureste español, donde el clima mediterráneo templado-cálido y de lluvias escasas podría dar lugar a un clima estepario o semi-desértico cálido y de lluvias muy escasas.

Respecto a la situación política tenemos otro verano caliente. La nueva presidente del parlamento español es la gallega Ana Pastor, del PP y ex ministra de Fomento (obras públicas), dicen a su favor que no está implicada en escándalos de corrupción, condición necesaria pero no suficiente para ser una digna y eficaz representante institucional.

En cuanto a su balance como ministra deja importantes obras para Asturias pendientes. Que una ladera se deslice es un problema geomorfológico y presupuestario serio, pero que no se acuerde la manera a colocar las vías en el lado asturiano de la variante ferroviaria del AVE en Pajares es una cuestión de gestión administrativa. Lo más llamativo y preocupante del actual verano en estas semanas previas a la posible investidura de Rajoy como presidente del Gobierno es el avispero nacionalista.

Arrastramos décadas de concesiones de más y más autonomía a los nacionalistas independentistas, y lo que hemos obtenido a cambio es más y más deslealtad y radicalismo, que si "España nos roba" que si referendo unilateral de independencia. El asunto no es solo la investidura, sino también la gobernabilidad, España y Asturias necesitan reformas para impulsar la recuperación económica eficiente, el empleo productivo, la regeneración democrática y la administración territorial constructiva. Trocear España sería poner barreras a la libertad y el progreso.