Veintidós millones de euros dan para muchas bombillas led y para toda la infraestructura necesaria para que cada día puedan ser encendidas. Esa cantidad es la que va a recibir Gijón de la Unión Europea para mejorar la iluminación de los barrios ciudadanos. La anterior alcaldesa, Paz Fernández Felgueroso, sostenía que Gijón tenía una muy buena iluminación nocturna que, aparte de buena, cumplía las normas europeas y no producía contaminación lumínica. Si ella lo decía, sería cierto, pero al viandante le da la impresión de que Gijón cuenta con una iluminación nocturna manifiestamente mejorable, mejoría que, sin duda, llegará con la importante inversión que se anuncia con los dineros procedentes de la salvadora Bruselas. Las noches gijonesas no son lo que eran, que dicen los pocos clásicos que van quedando, pero la luz ha de mantenerse encendida para el servicio de los peatones, automovilistas o simples curiosos.
