En un verano cuajado de acontecimientos políticos relacionados mayormente con las inminentes elecciones generales; sin olvidar, por supuesto, escándalos y corruptelas de variado pelaje y los desastres migratorios que retratan la más vergonzosa cara de Europa, el Gobierno del Principado continua incesante a la búsqueda de Eldorado en el occidente de nuestro maltrecho Paraíso Natural, con la ínclita Belén Fernández -incomprensiblemente de nuevo responsable de los asuntos medioambientales- como adalid de la causa. Denuncia la Coordinadora Ecoloxista d´Asturies que el enésimo proyecto solicitado esta vez por la empresa Emerita Resources España S.L.U. -anteriormente ya lo hizo la minera Orovalle, que antes fue Kimbauri, que antes fue Río Narcea Gold Mines...- se salta a la torera la normativa al no concretar los puntos que va a agujerear (30 sondeos y 10 excavaciones) y no hacer ni puñetero caso al posible impacto sobre el patrimonio natural. Esta vez son los concejos de Tineo y Allande -con 26 millones de m2 a convertir en un queso de Gruyere- los ganadores de un sorteo que posiblemente los deje hechos unos zorros.
