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El Puentón

Una plaza para los Cortés Llanos

La sugerencia popular de dedicar una plaza a la familia canguesa

Me hago eco de una sugerencia vecinal que bien podía ser atendida por el actual equipo municipal de gobierno de Cangas de Onís, presidido por el popular José Manuel González Castro, centrada en poner el nombre de Hermanos Cortés Llanos a la plazuela localizada en las inmediaciones del palacio Cortés (siglo XVI), donde cada domingo se desarrolla gran parte del mercado semanal en la vieja capital del Reino de Asturias. De hecho, hasta la fecha, esa pequeña plazoleta canguesa con pavimento de aglomerado asfáltico carece de nominación, por lo que bien podría darse el susodicho nombramiento a ese coqueto lugar de la ciudad y más teniendo en cuenta el amplio bagaje cultural y social desarrollado por esa conocida saga familiar.

Antonio Cortés Llanos (1812-1871), oriundo de Argolibio (Amieva), fue uno de los propietarios del palacio Cortés y en él se alojaron ilustres personajes que giraron visita al Santuario de Covadonga, tales como la mismísima Reina Isabel II, acompañada de su hijo, el príncipe de Asturias, y su confesor, el padre Antonio María Claret, allá por el año 1858. Igualmente, llegó a ser alcalde de Cangas de Onís y diputado, presidente del Consejo provincial y Gobernador interino de Asturias. El tiempo que le dejaba libre su profesión de abogado, en que se ocupó constantemente, lo dedicó a su faceta de arqueólogo, excavando el dolmen de Santa Cruz a mediados del siglo XIX, reuniendo una importante cantidad de lápidas romanas y piezas de gran valor como la antigua pila bautismal de San Pedro de Villanueva.

Sus diferentes y doctos trabajos acabaron siendo muy valorados y apreciados, y las Reales Academias de la Historia y de Nobles Artes de San Fernando le nombraron su Académico correspondiente. Entre las obras que escribió sobresalen dos de ellas: "Memoria histórica-crítica-filológica sobre la inscripción de Santa Cruz de Cangas de Onís" y también "Investigaciones sobre Vadinia, población romana en el concejo de Cangas de Onís". Antonio Cortés, además, fue miembro de la Comisión Provincial de Monumentos y buena parte de su colección particular sería donada a los Museos arqueológicos Provincial y Nacional. Incluso rescató de la demolición del antiguo hospital de peregrinos de Cangas algunos elementos que hoy adornan la entrada a la finca del palacio Cortés.

Uno de sus hermanos, José, cursó estudios de Derecho y Jurisprudencia en la Universidad de Oviedo, era muy aficionado a la poesía, publicando varios trabajos, entre ellos "Arpa Rota" (1858). Falleció en 1862. Por su parte, su hermano Bonifacio (1818-1884), también abogado, llegó a colaborar en algunos periódicos y fue diputado a Cortes, Consejero de Estado e Intendente del Real Palacio, en tiempos de Alfonso XII; y su hermana Antonina (1823-1906), esta autora de los volúmenes de poemas titulados "Romancero de Covadonga", editado en 1899, así como también de la popular "Leyenda de la estrella de Enol", entre otros exitosos trabajos. Sin duda alguna, toda una saga familiar volcada con el mundo de la cultura canguesa y, por ende, asturiana.

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