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La mar de Oviedo

Fontcuberta

Fui a la exposición de Joan Fontcuberta, dos muestras distintas en el Museo de Bellas Artes, y vi su cuidadísima edición en sendos libros, pero me interesó más su video para justificarse; su discurso hablado me pareció excepcional, magnífica su dialéctica, capaz de defender esas obras o las que se tercien. El texto supera la imagen; valen más cien palabras de Fontcuberta que una foto suya; me atrevería a decir que con sus palabras sobra lo demás. Prefiero el filósofo al fotógrafo y sus imágenes escondidas, captadas en minas, pozos, alcantarillas y refugios olvidados. Joan quiere salirse del tópico, del vertedero convencional, del estereotipo de nuestro paisaje; su "porosa voluntad" busca en la disonancia el instante decisivo, el espacio decisivo, quiere subvertir (como otros muchos), pero sin su brillante discurso su obra oscura se desvanece como un estereotipo más.

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