Leíamos el miércoles pasado en este periódico, con cierto asombro, una nueva muestra de autobombo por parte de Ana Taboada, que disertaba sobre el futuro de Oviedo. Cualquiera que no haya vivido en la ciudad los últimos dos años y medio, podría hasta ver coherente la disertación, pero a todos los ovetenses que aquí hemos estado, asistiendo atónitos a sus maniobras, nos va a permitir que nos suene a novela facilona, con la que nos quiere colar lo que debería ser pero no fue, ni de lejos.

Nos asombrábamos porque no deja de resultar chocante, que muchas de esas ideas "novedosas" con las que presume de haber diversificado la actividad económica, ya estaban puestas en marcha por el gobierno del PP. El vivero de ciencias de salud de La Corredoria, o el Talud de la Ería, es lógico que se los quiera adjudicar como propios, porque son francamente buenos proyectos, pero fuera de su propia novela, todo el mundo sabe que cuando el tripartito llegó ya existían. Le faltó poner el prólogo a la señora Taboada.

Y nos asombrábamos además, porque la novela firmada por la concejal de Somos, lo que hace evidente es que lo bueno que tiene esta ciudad hoy, sigue siendo aquello que iniciaron los gobiernos anteriores. Y hace evidente también lo que llevamos tiempo diciendo hasta la saciedad: nada propio tienen que aportar, pues nada propio incluye en su novela.

Es francamente gracioso también, el capítulo en el que se erige en defensora de la familia y la conciliación, o de una ciudad amable. Se le olvidó incorporar algunos personajes en la novela. Por ejemplo, a los taxistas, en concreto a las mujeres taxistas a las que tan "amablemente" se niega a recibir.

Nosotros sí creemos que esta ciudad tiene futuro, un buen futuro. Pero ese desarrollo no pasa por las políticas de Somos, ni del tripartito.

Compartimos, como no puede ser de otro modo, y como demostró nuestro trabajo, que Oviedo debe de apostar por el empleo, por dar oportunidades a los jóvenes y sobre todo creemos que el futuro pasa por el apoyo a los emprendedores y ese apoyo pasa por compromisos reales. En el año 2017 diferentes asociaciones que tenían convenio con el Ayuntamiento para dinamizar y dar servicios a los ovetenses dentro del programa Oviedo Emprende no fueron renovados de manera que no pudieron continuar sus servicios. Esto se debe a la nefasta gestión del concejal de Economía. Bien haría la señora Taboada en hablar con su compañero antes de lanzarse al auto elogio.

Habla la edil de Somos del reto de diversificar la actividad económica para fijar población, para crear empleo y nuevas oportunidades, pero se olvida de mencionar la dificultad que están teniendo muchas personas para desarrollar sus actividades, debido al atasco que la nefasta gestión del tripartito ha traído al área de licencias del Ayuntamiento. Esta es la realidad, y dista bastante de la novela que nos quieren vender.

El Partido Popular había puesto en marcha y llevaba en su programa medidas destinadas precisamente a ese impulso, que súbitamente le ha dado a la portavoz de Somos, para desarrollar el futuro de Oviedo. Medidas como la de Smart City, que tantos beneficios está aportando en ciudades líderes a nivel mundial, y que en Oviedo fue despreciado y ridiculizado por Wenceslao López.