La Mancha es la mayor "mancha" vinatera de Europa, es decir, la zona con mayor extensión de viñedo, extendiéndose por toda Castilla La Nueva, como la conocemos aquellos que hicimos el bachiller de reválida. Bajo el paraguas de la D.O. La Mancha encontramos infinidad de vinos y marcas poco ilustres, pues la fama de esta apelación siempre estuvo en entredicho. Las pocas marcas que mantenían una cierta fama decidieron alejarse para formar parte de otras denominaciones privadas, vinos de pago o acogerse a la genérica Vinos de la Tierra de Castilla donde no tenían que arrastrar una mala fama proveniente de la venta de graneles en su mayor parte.

Curiosamente la blanca airén es la uva de mayor volumen en la zona pero la que menos vinos produce pues su función es la de abastecer mayormente a las bodegas para generar alcohol vínico que se utiliza a gran escala en Jerez para la elaboración de sus afamados brandys. Probablemente en La Mancha, la cencibel o tempranillo, tiene más fama que la airén y suele usarse para elaborar todo tipo de vinos, desde jóvenes hasta vinos con largas crianzas y a precios muy contenidos.

También La Mancha ha servido de vivero para plantar variedades internacionales como petit verdot, merlot, cabernet sauvignon, cabernet franc, syrah, viognier e incluso algún clon de riesling. De todas ellas, he probado vinos que no se han comportado mal elaborados con syrah o con petit Verdot. Una climatología más cálida que en el norte permiten un buen desarrollo de ambas variedades, aunque esto no quiere decir que se comporten mejor que en sus países de origen.

Bodegas Campos Reales es una cooperativa que siempre ha elaborado millones de litros de vinos con una calidad bastante significativa. Sus vinos jóvenes han tenido tradicionalmente muy buena acogida entre los consumidores. De sus depósitos sale este casi monovarietal de syrah ecológico con un toque de cencibel y un golpe de barrica que hace de él una delicia y máxime si le echamos un vistazo al ajustadísimo precio que maneja. Perfecto, por ejemplo, para acompañar bonito a la plancha.