Oviedo, Sara ARIAS

Al frente frío que está instalado con fuerza en Asturias le queda ya poco tiempo. Las lluvias y el viento comenzarán esta tarde a remitir y se espera un fin de semana de sol y de playa. Aunque en la jornada de hoy todavía las precipitaciones serán generales en toda la región y persistentes. Las lluvias de estos días han dejado medias de hasta 40 litros de agua en 12 horas y el Principado continúa en alerta amarilla por lluvia y viento, que estos últimos días ha soplado con fuerza en todo el litoral cantábrico.

La buena noticia es que para mañana, y a pesar de que aún habrá lluvias en la madrugada y el día amanecerá nuboso, a lo largo de la jornada irán abriéndose claros, que darán un descanso a las nubes y propiciarán la salida del sol.

Además, se espera buen tiempo para todo el fin de semana. El sábado brillará el sol y se producirá un aumento de las temperaturas, previsión que se espera también para el domingo. El calor veraniego aguantará unos días, pero, según las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología, agosto y septiembre serán lluviosos.

Esto no quiere decir que se esperen pocos días de sol, ya que es probable que el agua llegue en forma de tormentas. Es decir, mucha agua, pero concentrada en poco tiempo.

Por otra parte, las temperaturas serán suaves, en la línea general de los veranos asturianos, (la temperatura media en julio en Oviedo en las últimas tres décadas es de 18,3º). Y es que la difícil orografía de la región hace muy difícil cualquier previsión a medio plazo. Lo mejor es ir siguiendo los pronósticos casi a diario. Parece que, según las previsiones, habrá que ingeniárselas con la lluvia de cara al mes de agosto, época en donde se aglutina la mayoría de las fiestas patronales. Asturianos y foráneos tendrán que ir sacando los impermeables.

Oviedo, Sara ARIAS

El frío y la lluvia hicieron desistir a algunos turistas de salir a la calle, pero los más valientes se pusieron el chubasquero y paraguas en mano fueron a visitar los sitios más turísticos de Oviedo, como la Catedral. No podían perderse algunas visitas y cumplir con el dicho de «quien va a Santiago y no al Salvador, visita al criado y deja al Señor». Así, ayer, dos jóvenes eslovacas de peregrinaje a Compostela descansaban en la Catedral. Pero se lamentaban de que no hiciese sol, algo que les facilitaba el camino a Santiago. Sin embargo, a otros no les importa, como a un grupo de mujeres que venían de Madrid. Ellas lo explicaban así: «A nosotras nos da igual, ya veníamos preparadas para esto».