Aida Menéndez es una de las jóvenes diseñadoras asturianas más aplaudidas de los últimos años. Ha conseguido aportar ese toque diferente en sus propuestas para llegar a una mujer que le gusta sentirse a gusto con lo lleva y diferenciarse de la mayoría. Por eso, entre otras muchas cosas, es una de las elegidas para una de las "pop up" más innovadores que se organizará a partir de la próxima semana en Mallorca. Pero antes de emprender esta nueva aventura, la joven ha preparado dos looks, uno de día y uno de noche, para ayudar a las lectoras de LA NUEVA ESPAÑA a acertar en sus citas veraniegas.
"Cuando pienso en a qué mujer dirijo mis prendas pienso en una mujer de 28 años en adelante, que se preocupa por lo que hay detrás de una colección, que le interesa en qué se inspira esa marca y que es inquieta culturalmente. Que cree en una producción responsable y apuesta por las pequeñas empresas", explica Menéndez.
Su propuesta para este verano es, como es habitual en la firma, una idea bucólica y cercana a la naturaleza. "Cassia" está teñida de colores frescos, pero en un punto apagado, y de blanco y negro. "Yo siempre visto de oscuro y por eso siempre aparece en mis diseños". Las mezclas de lisos y estampados siguen siendo sutiles. Y como ocurría en sus propuestas anteriores, los diseños de esta temporada permiten combinaciones infinitas, ya que la versatilidad es su característica más destacable.
Partiendo de esta idea, Aida Menéndez aconseja para las citas de día de este verano un look conformado por un vestido a modo de maxi chaleco y un pantalón culotte de crepe de seda, en color carmín apagado; y una blusa oversize, también de crepe, en blanco. "Es una silueta femenina, que favorece a varios cuerpos. Es un conjunto rompedor, que aporta ese toque actual y moderno para triunfar en un cóctel o tomando el aperitivo en una terraza".
Este conjunto admite mucho tipo de calzado, pero la diseñadora apuesta por "una sandalia con plataforma, si queremos darle un punto casual; unas sandalias planas tribales o étnicas en blanco y negro para las citas más informales; o un stiletto para ir más arreglada". En cuanto a los complementos, opta por un sombrero de ala ancha y "un bolso chiquitito de Miu Miu, Prada o Marni, que son mis firmas favoritas".
Este look no necesita grandes maquillajes ni peinados. "Una buena opción puede ser lo que lleva la modelo, unas trenzas invertidas que se empiezan por el final para conseguir relieve. Y en cuanto al maquillaje, muy natural y con el eye liner marcado en azul, que aporta ese toque veraniego".
Para la noche, Aloha Tatá vuelve a escoger el pantalón, esta vez, en su versión short. Para brillar en una cena, una fiesta al aire libre o en un concierto, la diseñadora escoge una camisa en color negro con jaretas en las mangas y que termina en manga farol y una falda pantalón corta en blanco con pequeños triángulos en negro creando el estampado. "Esta silueta tiene concentrado el volumen en la parte de arriba, y baja hacia las piernas convirtiéndose en lineal, a pesar de las capas superpuestas del short". Escoge el color negro porque cree que es "el comodín de la noche" y pone el toque alegre con los matices en blanco. El juego de largos, entre la manga y el pantalón, es la forma de conseguir un look redondo, sin excesos, y adaptable a cualquier plan. Para dar el toque chic al conjunto, unas sandalias abotinadas o unos stilletos en negro son la mejor opción. Al igual que un cluth o una cartera de mano en el mismo tono.
El maquillaje se mantendría como en el día "pero subiendo el labio, con un tono más, y manteniendo el eye liner marcado en azul". En cuanto al pelo, Menéndez ve como un acierto la melena suelta o unas trenzas abiertas despeinadas.
