Hombres y mujeres, sobre todo hombres, de piel enrojecida hasta un punto poco saludable, con bermudas floreadas de colores chillones y sandalias de piscina con calcetines blancos. Así son los guiris, esos habitantes que invaden las costas españolas cada verano procedentes de Alemania o el Reino Unido, que nos dejan mucho dinero en las arcas, sobre todo en las de los bares, y estampas fashion muy impactantes.
Pero sus considerados horrores en moda han trascendido mucho más allá de lo imaginable. Sí, sí, llevar sandalias con calcetines es "in".
Hace años que el bloguero y diseñador asturiano Pelayo Díaz recorría las calles con este look, seguramente influenciado por sus años de estudiante en Londres; y muchos se quedaban ojipláticos a su paso.
Quién se iba a imaginar que en el verano de 2015 ese sería el estilismo de moda entre los más trendy. El año pasado, las pasarelas y los cazatendencias lanzaron los primeros avisos, y esta temporada este "feísmo" se ha apoderado de los estilismos de los habituales de las terrazas de moda para practicar el "after beach", casi más popular que el "after work".
Pero seguir esta moda y no dar vergüenza ajena tiene su complicación.
Nada de poner cualquier chancla de grandes almacenes en verde lima. Si quieres ser hipster, cálzate unas Adidas azul y blancas, las de toda la vida, o unas Birkesntocks, otro "feísmo" ante el que casi todos hemos caído rendidos. Porque hasta en lo feo hay que tener estilo.
