Oviedo, J. A. ARDURA

El Principado ha decidido «cerrar el grifo» del gasto correspondiente a 2010, ante la caída de ingresos derivada de la crisis. El «Boletín Oficial del Principado» acaba de publicar esta semana las instrucciones para cerrar la contabilidad del presente ejercicio y señaló el día 20 de este mes como la fecha tope para autorizar y disponer del gasto comprometido. La Consejería de Economía ha adelantado en dos meses el plazo para disponer los pagos de gasto nuevo respecto a los años de bonanza económica.

El consejero de Economía, Jaime Rabanal, dictó días atrás una resolución, publicada en el BOPA del pasado martes, en la que se dan una serie de instrucciones para el cierre de la contabilidad anual. La mayor novedad consiste en el adelanto de la fecha para la emisión, por parte del resto de consejerías, de documentos contables que conlleven la autorización o disposición de gasto, que quedó fijada en el 20 de octubre. En los años de bonanza económica, como 2005 y 2006, los compromisos de gasto nuevo se tramitaron hasta el 15 de diciembre.

El «cierre del grifo» en el gasto del Principado no afectará a las nóminas ni a los pagos a los acreedores por servicios ya prestados o suministros ya entregados, según confirmaron fuentes de la Administración regional. Las restricciones afectarán exclusivamente a nuevos compromisos de gasto que, estando previstos por las distintas consejerías de la Administración regional para este ejercicio, aún no se habían ejecutado a fecha del pasado 20 de octubre. Con posterioridad a esa fecha cualquier autorización de gasto debe contar con el visto bueno del consejero de Economía, Jaime Rabanal, que tiene capacidad para autorizar o denegar los pagos. En resumen, con esta medida el departamento de Economía asume un mayor control sobre el gasto del conjunto de la Administración regional, en un año marcado por la caída de los ingresos fiscales derivada de la crisis. Fuentes de la Administración vincularon el adelantamiento del plazo a «las tensiones de tesorería» propias de una coyuntura económica de crisis, aunque descartaron que el Principado tenga problemas de liquidez. Además, el dinero de las partidas que ahora quedan retenidas hasta el ejercicio de 2011 podrá emplearse para otros fines, según añadieron las mismas fuentes. Las instrucciones del consejero de Economía sobre el cierre de la contabilidad se publicaron en el BOPA justo el día después de que concluyese el debate sobre el estado de la región, a cuyo término el presidente, Vicente Álvarez Areces, anunció que Asturias deberá ir al límite de endeudamiento, unos 300 millones de euros, en el Presupuesto de 2011, el mismo día en que Rabanal reveló que Asturias deberá devolver más de 700 millones al Estado por el dinero que recibió de más en 2008 y 2009, que deberá reintegrar a partir del próximo año. La medida causó cierta sorpresa entre los funcionarios de las distintas consejerías, que tuvieron que acelerar expedientes para que entraran dentro del plazo.