La costa asturiana es un regalo. Por eso en los últimos años cada vez son más las rutas senderistas que se abren mirando hacia la mar, que se suman a las ya tradicionales. Uno de esos recorridos placenteros es la senda que va de Luanco a Bañugues, en Gozón, pasando por la playa y parque de Moniello. Unos cuatro kilómetros a lo largo de los cuales es habitual encontrarse, si el tiempo acompaña y el sol invita a disfrutar del entorno, con paseantes de toda edad y condición; desde aquellos que, ya jubilados, van en animada conversación disfrutando de un camino reconfortante a los jóvenes que prefieren aprovechar para hacer deporte, muchos de ellos en bicicleta. También hay algunos haciendo footing y, cerca de Bañugues, abundan los pescadores pertrechados de cebo y caña, dispuestos a pasar un buena jornada con su afición favorita.
La senda peatonal Luanco-Moniello-Bañugues es un recorrido delicioso donde no faltan, de tramo en tramo, amables bancos de madera donde descansar. Todos con vistas al mar. La ruta, que cuenta con algún que otro tramo pindio pero sencillo, también ofrece en algunos momentos la agradecida sombra del bosque, aunque la mayor parte del tiempo el paseante transita por prados que casi están tocando el Cantábrico. Los que opten por iniciar la ruta en Luanco tienen que partir del área recreativa de La Mofosa, donde se encuentra el panel indicador de la ruta. Lo cierto es que está bien señalizada hasta Bañugues y, en los cruces, siempre hay un cartel indicativo con el nombre del lugar al que se puede ir si se coge el desvío.
Al poco de comenzar, se descubren los primeros acantilados y, un poco más adelante, la playa y puerto de Moniello, de cantos rodados, pequeñina, donde duermen pequeñas embarcaciones de pesca. El arenal está separado de Luanco por la sierra de Peroño, en cuyo extremo marítimo se encuentra la llamada Punta de la Vaca, bien visible desde el área recreativa y parque de Moniello, donde hay servicio de bar restaurante. Un lugar en el que se puede comer o pararse para comprar bebida. Se dice que bajo la Punta de la Vaca se encuentra la piedra del Castillo, donde se levantaba un pequeño recinto de piedra del siglo XVII que servía para la defensa de Luanco.
Una vez se deja atrás esta zona, se continúa hacia la playa y pueblo de Bañugues en un tramo de gran belleza, con rincones donde la tierra se asoma a acantilados y alguna que otra pequeña playa, en su mayor parte también de cantos rodados, que invitan a disfrutar de la fotografía y de la pesca.
Desde Gijón, se accede a la ruta por la carretera AS-239; desde Avilés, por la AS-238, y desde Oviedo, por la A-66, tomando el desvío Tabaza-Candás-Luanco de la AS-110.