Con una nutrida oferta de vuelos domésticos, aunque centrada en los destinos de playa, y con los enlaces a Madrid y Barcelona operados sin competencia, los esfuerzos del gestor nacional Aena y del Principado se han centrado en la captación de conexiones internacionales. Sin embargo, todas las gestiones fueron fracasando. Lo mismo las realizadas ante Lufthansa y su filial (Germanwings) para contar con un enlace a Fráncfort, que las llevadas a cabo con Transavia, filial de bajo coste de Air France para un enlace con Amsterdam, o las de Jet2.com para conectar con Inglaterra, y Wizz Air, para rutas con capitales centroeuropeas.
A la vista de que los aviones al extranjero sólo despegan con dinero público, el Gobierno regional, que firmó el pasado año un convenio millonario con Iberia que no está ligado a la apertura de nuevas rutas, licitó hace unos meses otro contrato para aerolíneas. En este caso, para intentar captar conexiones con Italia y Alemania a golpe de talonario. Conocedores del sector aseguran que el pliego de condiciones estaba hecho a medida de Volotea, la única empresa que ha concretado una oferta. Ryanair llegó a presentar un recurso por este motivo ante el Ministerio de Hacienda. Fue rechazado y la compañía sopesa ahora la posibilidad de acudir a la vía judicial. Munich y Venecia, los destinos favoritos para Volotea en el caso de que gane este concurso, incrementarán la oferta internacional de vuelos de Asturias. La compañía ya ha avanzado que el servicio se centrará en los meses de verano y que sus objetivos de futuro en el Principado no tienen en cuenta el vuelo de negocios, lo que limita las posibilidades de desarrollo del aeropuerto como motor de competitividad de la economía asturiana.
