El mando del coronel jefe del regimiento "Príncipe", Óscar Lamsfus, está coincidiendo con importantes cambios en la unidad. El último, la designación de la Brigada Aerotransportable, a la que pertenece el regimiento, como "punta de lanza" de la OTAN. "Tendremos que dormir con la mochila hecha", asegura el coronel, que retendrá al mando hasta diciembre. El "Príncipe" podría ir destinado a cualquier punto en que hubiese una amenaza. "Realizamos labores humanitarias, pero no somos una ONG", dice.
-Después de año y medio, ¿cómo está la unidad?
-Cuando me incorporé, el regimiento acababa de regresar de Afganistán. Fue necesario un periodo de recuperación, y luego retomar el adiestramiento para misiones genéricas. Durante ese tiempo, ha habido una evolución importante. Se produjo la reorganización del Ejército, con la creación de las Brigadas Orgánicas Polivalentes. Hemos tenido que convertir uno de los batallones ligeros en batallón MRAP (antiminas y antiemboscadas), con los vehículos RG31, y el otro se ha transformado en batallón BMR, con blindados 6x6, que son ya un poco antiguos. Esperemos que en un futuro no muy lejano, si la situación económica lo permite, recibamos los blindados 8x8, que es el tipo vehículo que utilizan hoy todos los ejércitos. Es necesario modificar las instalaciones para construir hangares y talleres para esos nuevos vehículos. Y ahora nos ha surgido una misión de la Alianza Atlántica para formar parte de una fuerza de reacción inmediata.
-La Very High Readiness Joint Task Force o VJTF.
-Hace ya años, la OTAN creó la NATO Response Force (NRF), que es una fuerza de respuesta rápida. Ahora, dada la situación actual, la Alianza Atlántica decidió crear una fuerza de respuesta más rápida aún, la punta de lanza que envía en primer lugar a cualquier parte donde haya una amenaza. La parte terrestre de esa fuerza es la Brigada Aerotransportable "Galicia VII", a la que pertenece el "Príncipe". Nosotros tenemos que aportar la tropa de infantería a esa fuerza conjunta. Y esa es nuestra misión, estar preparados, adiestrarnos de forma continua para esa VJTF. Así estaremos a lo largo de 2016. En 2017 pasamos a un preaviso más largo. ¿Para ir a dónde? Donde nos digan.
-Tienen que estar desplegados en 48 horas.
-El aviso es muy rápido, eso supone un sacrificio tremendo. Tendremos que dormir con la mochila preparada al lado, prestos a salir de inmediato. En 48 horas hay que estar saliendo. No solo hay que tener preparado el equipo, hay que tener lista la unidad, los vehículos, la impedimenta, armas, munición y listas de embarque para meterte en el medio aéreo que corresponda.
-¿Algún ejercicio previsto?
-Ahora mismo estamos en el proceso de certificación para formar parte del VJTF. Pasado mañana salimos hacia el campo de maniobra de Zaragoza para participar en un ejercicio para hacer la validación nacional. La continuación será en Zaragoza también, en octubre, para la certificación internacional. Será un ejercicio muy importante para la OTAN.
-Son ustedes una de las instituciones mejor valoradas. ¿Por qué?
-La sociedad se ha dado cuenta de la utilidad que tienen las Fuerzas Armadas, la seriedad con que trabajar, la eficacia. No nos metemos en disquisiciones, somos leales, honrados y obedientes. Influye la labor humanitaria que se realiza en las misiones internacionales, y que las operaciones hayan salido bien.
-Usted ha estado en cinco misiones, en Bosnia, Irak, el Congo y Afganistán. ¿Cuál fue el momento más apurado?
-Momentos apurados todos tenemos. Se pasan en todas las misiones.
-¿Es duro estar lejos de la familia?
-Claro que sí. Aunque están más preocupados los que se quedan que los que vamos de misión. Cuando salimos a operaciones, tratamos de tener respeto a la población civil, somos los peces que vivimos en ese agua. Necesitamos el apoyo de la población. Por nuestra idiosincrasia, los españoles tenemos facilidad para tener buen "feeling" con la población. Pero no siempre ocurre así. En las operaciones hay siempre dos bandos y la población te acepta más o menos. Se intenta ayudar a la población. Suelen verse situaciones muy desesperadas.
-Hace unos se decía que el Ejército se había convertido en una ONG.
-No somos una ONG. Por lo pronto esas organizaciones no son gubernamentales, nosotros sí. Nuestras misiones no son siempre humanitarias.
