Una avería ocasionada por la lluvia mantuvo cortado durante toda la jornada de ayer el tendido de cercanías de la antigua Feve entre Gijón y El Berrón (Siero), por el que pasan más de sesenta trenes al día, y reforzó la exigencia de inversiones urgentes para la mejora de la red de ancho métrico de la región, dependiente del Adif y cuyo deterioro es evidente. "Si con cuatro gotas que cayeron por la noche pasa esto, qué no ocurrirá cuando lleguen los grandes temporales del invierno", advierte un veterano ferroviario, que no duda en achacar el percance de ayer a la "falta de mantenimiento" de la red. "Si estuviese bien, seguro que no pasarían estas cosas", subrayó.

La avería que cortó la conexión ferroviaria entre los concejos de Gijón y Siero, primero y cuarto, respectivamente, de Asturias, llega poco después de que el Adif haya decidido anular un contrato de 12,8 millones de euros destinado a la mejora de los tendidos de ancho métrico en el Principado y en Galicia.

En concreto, el percance de ayer se registró entre las estaciones de La Aguda y La Florida, en la línea de cercanías de Gijón a Pola de Laviana, poco después de las nueve de la mañana. Según fuentes ferroviarias, la lluvia caída durante la noche y la madrugada provocó una acumulación de agua tal que acabó dañando el dispositivo eléctrico y provocó una cancelación del servicio que se prolongó durante toda la jornada y que aún no se había recuperado anoche, al cierre de esta edición. El Adif achacó el problema a una "incidencia en la infraestructura".

Los pasajeros afectados por el corte viajaron por carretera entre Gijón y Pola de Siero en los autobuses fletados por la operadora ferroviaria. Los ferroviarios consultados coinciden en señalar que sucesos como el de ayer ponen de manifiesto la necesidad de invertir en la mejora de la vía estrecha de la región, para evitar que la "sangría" de viajeros que sufre desde hace una década desemboque en un cierre.

La supervivencia de Feve, que ya vivió una situación límite el pasado verano a causa de una oleada de cancelaciones, está pendiente de la decisión que adopte el nuevo ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, sobre la Obligación de Servicio Público que obliga al Estado a mantener abiertas las líneas con esa catalogación por su relevancia social, aunque sean muy deficitarias económicamente. Todos los tendidos de vía estrecha de la región tienen esa declaración prorrogada. Su futuro será muy oscuro si no consiguen renovarla.